Resumen

Respuestas de los países en desarrollo en materia de protección social ante el COVID-19: Fortalecer la capacidad de recuperación mediante la creación de una protección social universal

Puntos clave

La pandemia de COVID-19 ha supuesto una llamada de atención que ha alertado a la comunidad mundial y a los responsables de políticas nacionales acerca de la urgencia de acelerar los progresos en el establecimiento de sistemas de protección social, en particular, de pisos de protección social. Los responsables de políticas de los países en desarrollo deberían tratar, en la medida de lo posible, de elaborar respuestas de emergencia a las crisis con una perspectiva a más largo plazo a fin de fortalecer los sistemas de protección social y el trabajo decente, incluso mediante el apoyo a la transición de la economía informal a la economía formal.

Es necesario aplicar una serie de medidas para dar una respuesta de emergencia adecuada y desarrollar una estrategia a más largo plazo que contribuya a fortalecer los sistemas de protección social y la preparación a las crisis en los países en desarrollo:
  • Garantizar el acceso a la atención sanitaria de calidad, movilizando fondos públicos adicionales para aumentar los presupuestos en el marco de la respuesta de emergencia, y salvaguardar y ampliar la cobertura de los mecanismos de protección social de la salud durante y después de las crisis.
  • Aumentar la seguridad de los ingresos mediante transferencias en efectivo, incrementando los niveles de prestaciones y ampliando la cobertura mediante programas nuevos o en vigor, adaptando las condiciones para recibir prestaciones, las obligaciones y los mecanismos de ejecución, y asegurando que, cuando sea necesario, las transferencias de efectivo humanitarias complementen y refuercen aún más los sistemas de protección social nacionales.
  • Proteger a los trabajadores de la economía informal mediante el diseño de políticas innovadoras para llegar a ellos con rapidez, combinando los regímenes contributivos y no contributivos y, a más largo plazo, facilitar su transición a la economía formal.
  • Asegurar la protección de los ingresos y los puestos de trabajo y promover el trabajo decente mediante sistemas de protección contra el desempleo y otros mecanismos para ayudar a las empresas a retener a los trabajadores y proporcionar un apoyo a los ingresos para los trabajadores desempleados, así como adaptar los programas públicos de empleo al contexto de la pandemia.
  • Coordinar más sistemáticamente las políticas de empleo y de protección social para promover una recuperación sostenible.
  • Movilizar recursos a nivel nacional y mundial sobre la base de la solidaridad, y estudiar diversas opciones con objeto de sostener y aumentar los esfuerzos después de la crisis para asegurar la financiación sostenible de sistemas de protección social basados en los derechos.
  • Aprovechar la llamada de atención que ha supuesto la COVID-19 para acelerar el establecimiento de sistemas de protección social universal, incluidos los pisos de protección social.