Lima - La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) definieron las líneas de acción conjunta a nivel nacional con el objetivo de aunar esfuerzos para hacerle frente a la trata de personas en Perú.

Estas líneas de articulación, resultado del trabajo coordinado de los equipos técnicos de ambas oficinas, se sustenta en tres ejes: fortalecimiento de capacidades técnicas con operadores de justicia, servicios y fuerzas del orden en zonas de tránsito o destino, integrando los enfoques de género e interseccionalidad; construcción de herramientas para la instalación de capacidades en contra de la trata de personas y, finalmente, coordinación y cooperación internacional.

Elena Montobbio, directora adjunta de la Oficina de la OIT para los Países Andinos, consideró que "la alianza con la UNODC es una gran oportunidad para afianzar la coordinación entre agencias de las Naciones Unidas en el país y potenciar los resultados en la lucha contra la esclavitud moderna, especialmente para el fortalecimiento de la institucionalidad y capacidad del gobierno peruano y su sistema de justicia penal para prevenir, perseguir y condenar este crimen, así como para identificar, proteger, asistir y reintegrar a las víctimas".

La OIT se dedica a la promoción del trabajo decente, la justicia social y los derechos humanos y laborales reconocidos internacionalmente. De manera específica, la OIT tiene, entre otras, la misión de contribuir a erradicar la trata de personas y el trabajo forzoso, formas de esclavitud moderna que atentan contra la dignidad de las personas, contribuyen a la perpetuación de la pobreza y obstaculizan el logro del trabajo decente para todos.

Por su parte, Antonino De Leo, representante de UNODC para Perú y Ecuador, responsable de la coordinación de operaciones en Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay destacó "el trabajo coordinado y articulado entre las agencias del Sistema de Naciones Unidas, así como otros actores de la cooperación internacional con los gobiernos es fundamental para hacer frente a un fenómeno complejo, trasnacional y que violenta derechos humanos de tantas personas en nuestra región. Con este esfuerzo sumaremos acciones para prevenir el delito, asistir a las víctimas, y fortalecer las respuestas en contra de los tratantes".

La UNODC, como custodia de la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional y sus Protocolos trabaja con los gobiernos, la sociedad civil y demás actores en el diseño e implementación de acciones en respuesta a la trata de personas con un enfoque centrado en las víctimas.

Durante 2022, esta hoja de ruta posibilitará, entre otras acciones: cursos sobre acuerdos plenarios y casaciones en materia penal y procesal penal; campamento forense en materia de investigación del delito de trata de personas para policías y fiscales; desarrollo de juicios simulados para el fortalecimiento de capacidades de operadores de justicia.