La Paz – El contexto generado por la pandemia de la COVID-19 ha puesto de manifiesto la urgencia de construir marcos institucionales y normativos de seguridad y salud en el trabajo sólidos y capaces de anticiparse a los impactos de nuevas crisis y proporcionar resiliencia al mundo del trabajo.

“Un sistema nacional de seguridad y salud en el trabajo (SST) sólido y resiliente salva vidas y protege los medios de subsistencia de las personas”, advirtió hoy Elena Montobbio, directora adjunta de la Oficina de OIT para los Países Andinos, en el evento de celebración del Día Mundial de la SST en Bolivia.

El viceministro de Trabajo y Previsión Social, Victor Quispe Ticona; el presidente de la CEPB, Luis Fernando Barbery; y el Secretrario de Relaciones Internacionales de la COB, Francisco Portillo, participaron en esta reunión para intercambiar lineamientos y afianzar compromisos en el proceso de formulación de la Política y el Plan Nacional de SST.

Bolivia, bajo el liderazgo del Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social (MTEPS), está trabajando con asistencia técnica de OIT en la construcción de este marco institucional nacional. “La seguridad y salud en el trabajo es un derecho reconocido por la Constitución Política del Estado”, resaltó Victor Quispe Ticona, viceministro de Trabajo y Previsión Social. “Debemos buscar las mejores vías para garantizar la salud y la seguridad de todos los trabajadores. La cooperación y coordinación es fundamental para cumplir estos objetivos y esperamos contar con lineamientos claros y concretos en este sentido”, dijo el viceministro.

Luis Fernando Barbery, presidente de la CEPB, también coincidió en la relevancia de fortalecer los marcos institucionales de la SST y planteó el compromiso del sector empresarial boliviano para apoyar este proceso. “Se ha priorizado el valor del ser humano como el componente más importante de la iniciativa privada. Podemos aportar en la búsqueda de consensos para ajustar y modernizar la gestión de SST en el país, para que pueda dar respuesta a las crisis emergentes. Nuestro rol debe ser de protagonismo central porque será esencial para planificar el futuro: las crisis no pueden volver a encontrarnos desprevenidos”, alertó Barbery.

La centralidad de la seguridad y salud en el trabajo para los trabajadores de Bolivia quedó expresada contundentemente en palabras de Francisco Portillo, Secretario de Relaciones Internacionales de la COB. “Lo más importante que debe salir de la mina, es el minero. Se tiene que garantizar la seguridad para todos, en todo momento y en todo lugar”, dijo Portillo. “Los sectores público y privado deben garantizar la seguridad y salud de los trabajadores y pensar en ella como una inversión, pues un obrero sano rendirá al 100% en la producción y economía del país”, insistió.

Contar con una política nacional de SST va a permitir a Bolivia: consolidar una cultura nacional de prevención, perfeccionar el sistema de información e investigación en esta materia, mejorar la coordinación entre gobierno, trabajadores y empleadores, garantizar la formación sostenible de los recursos humanos especializados y actualizar la legislación vigente.

Susana Sottoli, Coordinadora Residente de las Naciones Unidas en Bolivia, saludó el involucramiento de empleadores, trabajadores y gobierno en el proceso de discusión sobre la futura política nacional de SST. “Es muy importante tener este espacio de diálogo nacional para abordar los retos y las medidas necesarias con el fin de lograr políticas de Seguridad y Salud en el Trabajo más efectivas y que permitan dar mejores respuestas frente al impacto de la crisis de la COVID-19 en Bolivia”, concluyó Sottoli.

Revisa a continuación la grabación del evento en vivo: