La OIT fue fundada por un tratado de paz en 1919 con el mandato de que sólo puede haber paz universal y duradera si se basa en la justicia social.

En este nuevo video, observamos las vías a través de las cuales el trabajo decente y el empleo pueden abordar los principales factores de conflicto en el marco del nexo entre la ayuda humanitaria, el desarrollo y la paz, permitiendo a las comunidades pasar de la fragilidad a la resiliencia, del conflicto al mantenimiento de la paz.

El video animado cubre las siguientes preguntas:

1. ¿Cuál es el mandato de la OIT en relación con el trabajo decente y cuál es su relación con la paz?
2. ¿Cómo puede el trabajo decente aportar soluciones a las personas en entornos frágiles o afectados por conflictos?
3. ¿Cómo debe actuar la OIT en contextos frágiles?
4. ¿Cuál es el papel de la OIT en el nexo entre acción humanitaria-desarrollo-paz?
5. ¿Qué significa contribuir a la P del nexo?
6. ¿Cómo distinguir una intervención insensible al conflicto de otra que contribuye activamente a la paz?
7. ¿Cómo puede el trabajo digno contribuir explícitamente a la paz?
8. Conclusión: el mandato de la OIT sobre el mantenimiento de la paz

En colaboración con los Estados miembros, los mandantes tripartitos, los socios internacionales y nacionales, y con la participación directa de las poblaciones locales y las partes interesadas, un triple enfoque de la respuesta a las crisis puede permitir una respuesta inmediata centrada en el empleo y los medios de subsistencia, que simultáneamente estimule y ayude al desarrollo socioeconómico sostenible a largo plazo de una manera inclusiva y basada en los derechos. Al mismo tiempo, este enfoque garantiza que el trabajo digno y la justicia social se promuevan como motores clave de la resiliencia y la paz desde la fase humanitaria, abordando los factores subyacentes de fragilidad que hicieron que la sociedad y la economía fueran especialmente vulnerables a los choques externos en primer lugar.