Sector rural y desarrollo local

Mesas Ejecutivas: una tecnología para el desarrollo productivo con trabajo decente

Contexto

En América Latina y el Caribe (ALC), la dualidad productivo-tecnológica es una característica común que se traduce en una estructura productiva conformada por un pequeño grupo de empresas altamente productivas y una gran cantidad de micro y pequeñas empresas (MYPE), microemprendimientos y trabajadores por cuenta propia con baja productividad y en la informalidad.

Estas unidades económicas operan principalmente en mercados domésticos con brechas de adopción de tecnologías y de acceso a servicios de desarrollo empresarial por lo que carecen de sistemas de gestión y buenas prácticas de manufactura vinculados con el aseguramiento de la calidad, la seguridad y salud en el trabajo, la producción limpia, etc. Esta situación, en cierta medida, explica el estancamiento de la productividad y la informalidad laboral en las áreas urbanas y rurales de ALC.

Para abordar estos desafíos se requiere, entre otras, fundamentalmente políticas de desarrollo productivo (PDP) y políticas de desarrollo empresarial (PDE) que impulsen la transformación productiva de las MYPE y consecuentemente lograr la transición a la formalidad de aquellas que tienen cierto potencial para insertarse en cadenas de valor formales.

Para avanzar en este camino también será necesario resolver fallas de coordinación público-pública, público-privada y privado-privada que imposibilitan brindar PDP y PDE integrales para encarar los déficits de trabajo decente y más en específico el débil desarrollo de las MYPE, la informalidad en ALC.

Las Mesas Ejecutivas (ME)

¿Qué son?

Las ME que impulsa la OIT buscan resolver fallas de coordinación mediante el trabajo conjunto público-privado. Son instrumentos de gestión pública que: identifican (y buscan eliminar) los cuellos de botella que afectan la productividad y la capacidad de generar trabajo decente de un sector o cadena de valor; se enfocan en la co-creación e implementación de soluciones sostenibles adoptando un modelo de continua retroalimentación durante el proceso.

Las ME incluye entidades del sector público, representantes de organizaciones de empleadores y trabajadores, y otros actores claves del sector privado y de la sociedad civil; cuentan con un equipo dedicado que coordina. El enfoque y metodología de las ME ayudan a construir una visión compartida y fortalece institucionalidad pública y el diálogo social.

Niveles de las ME

Las MEs tiene dos niveles funcionales: un cuerpo operativo y uno de alto nivel. El primer grupo lo conforman quienes tienen más información sobre los problemas productivos. Esto incluye a tres agentes principales: i) entidades del sector público, ii) representantes de empleadores y trabajadores, iii) un equipo que dirige las operaciones de la ME. El cuerpo de alto nivel opera el ámbito viceministerial y ministerial, e incluso el jefe de Estado, y es necesario para asignar una mayor capacidad de recursos para promover la coordinación.

Enfoque recursivo y de investigación-acción de las ME

Una característica central de las MEs es su recursividad. Las MEs se alejan de delinear una hoja de ruta y se enfocan en una propuesta de investigación-acción. Para ello, asumen que los diagnósticos y planes son herramientas preliminares, y que la implementación enriquece al diagnóstico, así como a la prescripción. Dicho proceso de investigación-acción funciona de la siguiente manera:

1. La ME establece un objetivo o visión de mediano plazo y un listado preliminar de problemas y soluciones.
2. De dicha lista se escogen tres o cuatro problemas más urgentes y se empieza a buscar soluciones para dichos problemas.
3. Los esfuerzos de implementación de esos tres o cuatro problemas iniciales proporcionan nueva información que permite afinar el diagnóstico inicial y sus soluciones propuestas,
4. En medida que se avanza, se van incorporando nuevos problemas a esta metodología recursiva.