Economía digital

Plataformas digitales: un futuro del trabajo con oportunidades y desafíos para América Latina y el Caribe

En una década ha aumentado 14 veces el número de plataformas digitales de trabajo en la región, y la COVID-19 acelera las transformaciones. Ahora surge la necesidad de aprovechar mejor las oportunidades de empleo y negocios en un sector donde predomina la gestión por algoritmos.

Noticia | 24 de febrero de 2021
Lima – Las transformaciones en el mundo del trabajo por la irrupción de plataformas digitales en América Latina y el Caribe auguran un futuro con nuevas oportunidades laborales, pero la región aún debe recorrer un largo camino para conseguir que ofrezcan oportunidades de trabajo decente e impulsen el crecimiento de empresas sostenibles, planteó la OIT.

“La COVID-19 ha provocado una aceleración de tendencias con respecto al futuro del trabajo, a la vez que exacerbó los numerosos desafíos asociados a las condiciones laborales en las  plataformas digitales”, recordó Vinícius Pinheiro, Director de OIT para América Latina y el Caribe, que tiene su sede en esta capital.

Un nuevo informe mundial de la OIT publicado esta semana sobre “El papel de las plataformas digitales en la transformación del mundo del trabajo”, puso en evidencia la gran difusión de este modelo de negocios en el mundo y también la región.

Durante la última década el número de plataformas digitales de trabajo que operan en toda la región aumentó 14 veces, es decir de 4 a 56 según los datos recopilados para elaborar el informe de OIT.

El informe global de OIT presentado el martes se basa en las conclusiones de encuestas realizadas a unos 12 000 trabajadores de 100 países de todo el mundo que trabajan en plataformas. También se apoya en entrevistas realizadas a representantes de 70 empresas de distintos tipos, 16 empresas de plataformas y 14 asociaciones de trabajadores de plataformas de todo el mundo en múltiples sectores.

Las plataformas digitales de trabajo en línea consideradas en el informe global de OIT pueden clasificarse en dos grandes categorías: las basadas en la web y las basadas en la ubicación.

En las plataformas basadas en la web, los trabajadores realizan tareas o encargos en línea o a distancia. Las tareas en las plataformas basadas en la ubicación incluyen los servicios de transporte, reparto o delivery, y otros como reparaciones a domicilio, trabajo doméstico o prestación de cuidados.

En la región la mayor parte de las inversiones se concentran en las plataformas de transporte y de reparto. En el contexto de la pandemia, en particular, ha sido notoria la presencia de las plataformas de reparto o delivery, que incluso fueron considerados como servicios esenciales.

“La expansión de las plataformas digitales de delivery durante la pandemia, un evento conocido como la 'pandelivery', se ha convertido fuente de trabajo fundamental para millones de personas, incluso para profesionales que perdieron sus empleos durante la pandemia”, dijo Pinheiro.

“Sin embargo, en muchos casos los trabajadores en las plataformas de reparto están sujetos a jornadas de trabajo más largas y extenuantes, bajos ingresos, altos niveles de informalidad  y mayor exposición a los riesgos de contagio “, agregó.

El Director Regional de la OIT recordó que “la pandemia podría convertirse en un catalizador que lleve la transformación digital del mundo del trabajo a otro nivel, mejorando considerablemente las oportunidades para millones de unidades productivas y trabajadores, siempre que existan las condiciones necesarias para el trabajo decente”.

En el camino será necesario enfrentar una serie de desafíos. Uno de los más importantes es el de enfrentar la “brecha digital” en la región, que limita el acceso de numerosas personas a la economía digital.

Otro desafío que genera controversia sobre el modelo de negocios de las plataformas es el de la relación de trabajo que se vuelve cada vez más difusa entre asalariados y autónomos.

El informe de OIT destaca que numerosas plataformas tienen una nómina de asalariados que garantiza sus operaciones y administración, y una gran planilla de colaboradores autónomos que efectúan la conexión entre empresas y clientes, cuya relación de trabajo con la empresa digital es poco clara.

Una característica que comparten estas plataformas es la denominada “gestión algorítmica” –es decir, los trabajos se asignan y se evalúan mediante algoritmos–, que implica seguimiento y evaluación continuos, establecimiento de sistemas de puntajes, la participación de los clientes en las evaluaciones, la interacción solamente a través de la aplicación, y cierta falta de transparencia sobre cómo funciona el algoritmo.

La OIT también destaca que la situación también plantea importantes desafíos para las empresas, algunas de las cuales enfrentan una mayor competencia en la cual tienen mayor ventaja las de mayor capacidad adaptación, por ejemplo para operar bajo el sistema de reparto, y las que además pueden absorber en sus costos las comisiones de las plataformas que en algunos casos son elevadas.

El diálogo social en los países y la cooperación internacional serán esenciales para configurar el sector de las plataformas digitales y abordar problemas como los de la clasificación de los trabajadores, la adaptación de los marcos jurídicos y de respuesta, las garantías de protección social y derechos que implican un trabajo formal, entre otros.

“La adopción de  medidas para mejorar las condiciones de trabajo de los trabajadores de plataformas digitales de delivery y transporte, no es solamente una cuestión de promoción del respecto a derechos laborales, también un imperativo ético de reconocimiento y valorización  de estos trabajadores esenciales“, agregó Pinheiro.