Representantes de las carteras de Trabajo de Centroamérica y República Dominicana aprobaron, en su más reciente reunión del Consejo de Ministros y Ministras, el plan de acción que se integrará al “Plan de Recuperación, Reconstrucción Social y Resiliencia de Centroamérica y República Dominicana”, el cual se constituirá en la hoja de ruta común para el área social del SICA y sus países miembros.

El plan del Consejo de Ministras y Ministros de Trabajo de Centroamérica y República Dominicana, preparado por los equipos técnicos de la región con apoyo de la OIT, y que contó con la aprobación de los jerarcas de Trabajo, busca que “Los países centroamericanos y la República Dominicana, en un marco de diálogo social, adopten estrategias y/o planes de recuperación socioeconómica post Covid-19 con transformación de la producción y el empleo, en un ambiente de trabajo seguro, que incluyan políticas de desarrollo productivo, salud ocupacional y el desarrollo de competencias laborales, y que apunten a la disminución de la informalidad, la precariedad laboral y las brechas degénero, la migración laboral irregular y el trabajo infantil y el trabajo doméstico”.

La aprobación del plan fue expresada en la “Declaración Virtual de Centroamérica y República Dominicana”, suscrita en la sesión que tuvo lugar el 23 de noviembre de 2020 y que fue suscrita por los Ministros y Ministras: Rafael Eugenio Rodríguez Pellecer, Guatemala; Oscar Rolando Castro, El Salvador; Olvin Aníbal Villalobos Velázquez, Honduras; Alba Luz Torres Briones, Nicaragua; Geannina Dinarte Romero, Costa Rica; Luis Miguel De Camps García, Republica Dominicana; y el Viceministro Roger Tejada Bryden, Panamá.

Las acciones contenidas en el plan se orientan a:

• Implementar estrategias para un retorno seguro al trabajo, a través de la aplicación de protocolos de bioseguridad para la prevención y mitigación de la COVID-19 en los lugares de trabajo.

• Impulsar planes de transformación productiva e inversiones con enfoque de clústeres, especialmente en los sectores más afectados por la crisis, y que contemplen la reducción de brechas de calificaciones de la fuerza laboral, así como la ampliación de opciones de reconversión y recalificación de trabajadores.

• Facilitar, por medio de una institucionalidad reforzada, la inclusión laboral y el empleo productivo y trabajo decente, con especial atención a la transición del empleo informal al formal y a las personas trabajadoras más afectadas por la crisis, y que incluya mecanismos  de apoyo a los sectores productivos de menores capacidades de mercado (Pymes, emprendimientos asociativos, economía familiar, entre otros).

• Promover la migración laboral regular, regional y extra regional, mediante la suscripción de acuerdos bilaterales o entre más países que contemplen normas sanitarias para proteger del contagio de la COVID-19 a las personas trabajadoras que se desplacen.

• Prevenir y mitigar los impactos de la crisis de la COVID-19 en el trabajo infantil y el trabajo doméstico.

En la sesión ordinaria del Consejo de Ministras y Ministros participaron también el Director de la OIT para América Latina y el Caribe, Vinicius Pinheiro, la Directora de la Oficina de la OIT para América Central, Haití, Panamá y República Dominicana, Carmen Moreno; y el Director Adjunto de esta oficina, Leonardo Ferreira. El Director Vinicius Pinheiro reafirmó en la sesión, el compromiso de la Organización Internacional del Trabajo de continuar con el acompañamiento en la implementación de estos compromisos desde la Oficina de la OIT para América Central, Haití, Panamá y República Dominicana.

El Director Pinheiro expreso que, si bien la pandemia del Covid 19 aceleró tendencias, como el teletrabajo, también proyecta posibles retrocesos en condiciones laborales por ejemplo el incremento del trabajo infantil y reducción de la participación de mujeres en el mercado de trabajo, entre otros impactos, que podrían hacer que los países retrocedan décadas. De ahí que desde la OIT reafirmamos nuestro compromiso con las respuestas de políticas para hacer frente a los desafíos que se presentan y que precisan el impulso del diálogo social como mecanismo esencial para que las medidas sean sostenibles en el contexto de esta crisis, afirmó.

Una hoja de ruta común para el área social del SICA

Según acuerdo tomado por el Consejo, el plan de los Ministros y Ministras de Trabajo se integrará al “Plan de Recuperación, Reconstrucción Social y Resiliencia de Centroamérica y República Dominicana” el cual tienen como objetivo “Articular las respuestas desde el sector público a las problemáticas sociales, laborales, y del ordenamiento territorial de los asentamientos humanos y el desarrollo urbano de los países integrantes del SICA con una perspectiva de integración regional, en las fases de reactivación social y económica post-COVID.”

Este plan tiene como ejes de intervención: 1) Protección social, 2) Empleabilidad y el empleo; y 3) Asentamientos informales y desarrollo urbano sostenible” y se aspira a que se constituye en la hoja de ruta común para el área social del SICA y los países miembros de esta instancia regional.

En la Declaración suscrita los Ministros y Ministras expresan “Acoger el Plan de Recuperación, Reconstrucción Social y Resiliencia de los países de Centroamérica y República Dominicana, en particular los Proyectos Estratégicos en el Eje No. 2 de Empleabilidad y el Empleo y sus vinculaciones con el Plan de Trabajo del Consejo, y agradecer a la Secretaría General de la SISCA y al Programa Eurosocial de la Unión Europea por la presentación efectuada”.

Según se puntualiza en la Declaración “Los planes aprobados podrán contribuir, además de mitigar los efectos derivados de la pandemia COVID-19, con la reconstrucción y transformación de los países de la región, que fueron severamente dañados por los huracanes Eta e Iota”.