Salud en el trabajo: silicosis
La silicosis es una enfermedad pulmonar incurable causada por la inhalación de polvo que contiene sílice cristalina libre. A pesar de todos los esfuerzos de prevención, la silicosis sigue afectando a decenas de millones de trabajadores en ocupaciones peligrosas y mata a miles de personas cada año en todo el mundo. La silicosis, con su potencial de causar discapacidad física progresiva y permanente, sigue siendo una de las enfermedades profesionales más importantes del mundo.
La experiencia de algunos países ha demostrado de manera convincente que es posible reducir significativamente la incidencia de la silicosis con programas de prevención bien organizados. Esto se ha logrado, por ejemplo, en Australia, Bélgica, Canadá, Finlandia, Francia, Alemania, Suiza, Suecia, Reino Unido y los Estados Unidos. Al no haber un tratamiento específico eficaz para la silicosis, la única manera de proteger la salud de los trabajadores es el control de la exposición al polvo que contiene sílice. El éxito en la prevención de la silicosis depende claramente de una serie de medidas preventivas.
A nivel nacional, la legislación, la aplicación de las normas técnicas y los límites de exposición en el trabajo, unos servicios de asesoramiento técnico, un sistema eficaz de inspección, un sistema de información bien organizado, y un programa de acción nacional en el que participen los organismos gubernamentales, la industria y los sindicatos constituyen los elementos indispensables de la infraestructura sólida necesaria para prevenir con éxito la silicosis.
A nivel de las empresas, la aplicación de tecnologías adecuadas para evitar la formación de polvo con sílice, el uso de métodos de ingeniería para el control del polvo, el cumplimiento de las normas técnicas y los límites de exposición, el control del entorno de trabajo para evaluar la eficacia de las medidas preventivas, el control de la salud de los trabajadores para detectar las primeras etapas de la silicosis, el uso de equipos de protección personal (como medida temporal), así como la educación, la información y la formación sanitarias son imprescindibles para el éxito de la prevención.
A nivel nacional, la legislación, la aplicación de las normas técnicas y los límites de exposición en el trabajo, unos servicios de asesoramiento técnico, un sistema eficaz de inspección, un sistema de información bien organizado, y un programa de acción nacional en el que participen los organismos gubernamentales, la industria y los sindicatos constituyen los elementos indispensables de la infraestructura sólida necesaria para prevenir con éxito la silicosis.
A nivel de las empresas, la aplicación de tecnologías adecuadas para evitar la formación de polvo con sílice, el uso de métodos de ingeniería para el control del polvo, el cumplimiento de las normas técnicas y los límites de exposición, el control del entorno de trabajo para evaluar la eficacia de las medidas preventivas, el control de la salud de los trabajadores para detectar las primeras etapas de la silicosis, el uso de equipos de protección personal (como medida temporal), así como la educación, la información y la formación sanitarias son imprescindibles para el éxito de la prevención.