Migración laboral

En el contexto actual de México, tal y como indican los estudios realizados desde la OIT, por otros organismos internacionales y por las cifras del gobierno mexicano, las personas trabajadoras migrantes y refugiadas continúan enfrentando serios déficits para acceder trabajo decente, con frecuencia se ven afectadas por un alto desempleo, informalidad, menores ingresos y situaciones de inseguridad.

Asimismo, barreras para acceder a servicios básicos como educación para sus hijos e hijas, vivienda digna, salud y seguridad social por motivos relacionados con su situación migratoria y que además se han agudizado por la crisis producto de la pandemia de Covid-19. Además, muchas personas trabajadoras migrantes son víctimas de prácticas fraudulentas o de explotación en el proceso de contratación.

Finalmente, aunque no hay datos precisos disponibles sobre el vínculo entre la migración y el trabajo infantil y los niños y niñas migrantes, la evidencia muestra que los niños y niñas migrantes de El Salvador, Guatemala y Honduras, que pasan o se quedan en México, especialmente los que viajan solos, son más vulnerables a la trata de personas, el reclutamiento forzado por parte de grupos delictivos organizados, así como otras peores formas de trabajo infantil.

Si bien, el fenómeno migratorio ha sido abordado en casi toda la región desde un enfoque de contención de la migración, en el caso de México, el interés de sus autoridades federales y estatales por garantizar los derechos de la población en situación de movilidad ha aumentado, así como también el del sector empleador en generar oportunidades laborales, estas todavía son insuficientes. Es por ello que la OIT desde su mandato de gobernanza de la migración laboral procura contribuir, en coordinación con sus constituyentes, a mejorar las condiciones de la población en situación de movilidad.

Trabajo de la OIT

El trabajo de la OIT en materia de migración laboral se centra en un enfoque regional, de coordinación permanente con Centroamérica, un enfoque federal y a nivel local con las entidades federativas y algunos municipios.

La OIT trabaja con población migrante, refugiada, solicitante de refugio, desplazada interna y retornada con necesidades de protección. Coordina sus acciones con otras agencias del sistema de Naciones Unidas como ACNUR, OIM y UNICEF, gobiernos, organizaciones de empleadores, trabajadores y algunas organizaciones de la sociedad civil. Trabajamos en los estados de Chiapas, Coahuila, Baja California, Yucatán, Quintana Roo y Ciudad de México.

Desde la OIT se busca, en coordinación con gobiernos, implementar programas de promoción del empleo y la empleabilidad, certificación de competencias, contratación equitativa y mejoras a los servicios de empleo que facilitan el transito al trabajo decente para las personas migrantes y define la implementación de leyes, políticas y programas para combatir el trabajo forzoso y la trata de personas en México.