Con el fin de contar con las mejores alianzas para la formación de los jóvenes en las regiones a través de las Instituciones Ancla, se llevaron actividades de alistamiento con los potenciales aliados. En primer lugar, se realizó una adecuada planeación para la totalidad del periodo de ejecución del proyecto. En segundo lugar, teniendo en cuenta el contexto actual de la educación superior y de ETDH relacionada con TIC, se identificó con rigurosidad el punto de partida del proyecto todo para facilitar su seguimiento y la evaluación de los resultados esperados al finalizar la ejecución del mismo. Por último, se están adelantando diversas actividades de divulgación y socialización para dar a conocer el alcance del proyecto entre los actores clave con un enfoque de superación de barreras de acceso al mercado laboral.

El último punto mencionado reafirma que el éxito del proyecto radica en forma significativa en contar con aliados estratégicos y calificados para vincularse al reto propuesto.

En este sentido, se están desarrollando una serie de herramientas y se realizarán las acciones necesarias que apunten a una alta divulgación de la estrategia tanto entre las instituciones de ETDH que operarán el proyecto y entre el sector empresarial interesado en participar de la cualificación de los estudiantes a través de prácticas empresariales para los beneficiarios del proyecto.

Ya seleccionadas las mejores IETDH como Instituciones Ancla, se realizaron las alianzas necesarias para ejecutar el proyecto en las siguientes Zonas seleccionadas:

Estas anclas apoyan la ejecución del proyecto cumpliendo con todos los requisitos habilitantes de la ficha técnica antes mencionada. Así mismo desarrollan tareas definidas con la vinculación de los estudiantes, su formación, seguimiento, vinculación a la etapa práctica y aseguran que se cumpla con el objeto del contrato. Las Instituciones Ancla tienen también la obligación de reportar y comunicar todos los aspectos sobre la ejecución del proyecto frente a información, programas, recursos y demás elementos.

La OIT se encarga de vigilar el cumplimiento de los compromisos de los proyectos, el cumplimiento de aspectos como infraestructura, calidad en los programas ofertados, pertinencia de los mismos, calidad en el equipo docente, administrativo y la capacidad operacional para poder cumplir con los cupos asignados y las garantías proyectadas.

Esta etapa se adelanta con centros de formación cuya idoneidad se verifica constantemente mediante visitas a instalaciones, mejores ofertas de contrapartidas y cumplimiento de exigencias legales sobre certificación de programas e institución por las respectivas secretarías de educación.