Declaración del Director General de la OIT acerca de la situación en Libia

Declaración | Geneva | 24 de febrero de 2011

El Director General de la OIT, Juan Somavia, comparte plenamente la gran preocupación y la condena expresadas por el Consejo de Seguridad y por el Secretario General de las Naciones Unidas acerca de la dramática situación que atraviesa Libia.

El Sr. Somavia declaró que los dirigentes libios deben poner fin de inmediato a las masacres, a la violencia a gran escala y a la represión generalizada desencadenada contra las personas que se manifiestan pacíficamente, ejerciendo sus derechos legítimos de libertad de expresión y de reunión.

Añadió, asimismo, que es motivo de especial preocupación para la OIT la difícil situación de los trabajadores, tanto nacionales, como migrantes y de sus familias, atrapados en medio de esta crisis humanitaria, social y política de gravedad creciente. Han de respetarse sus derechos, sus opiniones y su dignidad, y ello implica el respeto del derecho básico a la libertad de asociación de los empleadores y de los trabajadores.

Los órganos de control del cumplimiento de las normas de la OIT han solicitado repetidas veces a Libia que permita a los trabajadores crear las organizaciones que estimen convenientes y afiliarse a las mismas. La OIT ha expresado su profunda preocupación ante el hecho de que las personas que han tratado de ejercer este derecho han sido objeto de medidas de represión, incluido el trabajo forzoso.

El Director General de la OIT declaró que deben crearse las condiciones nacionales e internacionales necesarias para una resolución pacífica de este conflicto, y que hay que tener en cuenta la voluntad de las personas en general, así como de las organizaciones representativas de los trabajadores y de los empleadores, lo cual reviste particular importancia.

La situación en Libia es un ejemplo más de que los problemas del desempleo, la pobreza y la ausencia de libertades generalizados y desatendidos constituyen un gran obstáculo para el desarrollo y pueden conducir a graves riesgos de seguridad a nivel nacional e internacional.

El Director General de la OIT hace hincapié en que el pueblo libio merece un esfuerzo sostenido en aras de un desarrollo con justicia social que ofrezca a todas las mujeres y hombres, particularmente a los jóvenes, su derecho legítimo a disfrutar de los frutos del progreso y que respete la dignidad y los derechos básicos gracias al trabajo decente.

La OIT está dispuesta, en cuanto las circunstancias lo permitan, a ayudar a Libia a alcanzar estos objetivos.