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La OIT y el BAD aúnan fuerzas para mejorar las normas del trabajo y promover el desarrollo

GINEBRA (Noticias de la OIT) - La Oficina Internacional del Trabajo (OIT) y el Banco Asiático de Desarrollo (BAD) han aunado fuerzas a fin de mejorar las normas del trabajo como medio para promover el desarrollo y reducir la pobreza en la región de Asia y el Pacífico.

Comunicado de prensa | 11 de octubre de 2002

GINEBRA (Noticias de la OIT) - La Oficina Internacional del Trabajo (OIT) y el Banco Asiático de Desarrollo (BAD) han aunado fuerzas a fin de mejorar las normas del trabajo como medio para promover el desarrollo y reducir la pobreza en la región de Asia y el Pacífico.

En un seminario conjunto celebrado recientemente, la OIT y el BAD llegaron a la conclusión de que el compromiso de los gobiernos de mejorar las normas del trabajo es fundamental para asegurar un desarrollo de base amplia y sostenible en la región de Asia y el Pacífico. La reunión recomendó que los gobiernos, el BAD y la OIT: recalquen las normas del trabajo en el diálogo sobre políticas que celebren con los gobiernos; promuevan una mejora de las normas del trabajo mediante el diseño de proyectos, por ejemplo, para hacer frente al trabajo infantil, mejorar la seguridad en el trabajo, reducir la discriminación en el lugar de trabajo o eliminar el trabajo en servidumbre; refuercen la supervisión de las condiciones de trabajo en la región, y desarrollen actividades para incrementar la capacidad y la concienciación a fin de mejorar las normas del trabajo.

Las dos Organizaciones han convenido reforzar la cooperación para promover condiciones de trabajo decentes que reduzcan la pobreza, eleven los niveles de vida y mejoren la calidad del crecimiento a través del aumento de la productividad, según indicó Akira Seki, Director General del Departamento de Desarrollo Sostenible Regional del BAD.

"No tener en cuenta las normas del trabajo perjudica el desarrollo de maneras concretas y mensurables", aseveró Lee Swepston, Jefe del Servicio de la Igualdad y el Empleo de la OIT. "El respeto de los derechos humanos fundamentales en el trabajo, y de las estructuras jurídicas y reglamentarias necesarias para ponerlos en vigor, ayuda a los trabajadores, los empleadores y las economías en su conjunto. También es una medida esencial para erradicar la pobreza. La OIT denomina a este proceso: 'trabajo decente'."

Las estimaciones indican que 1.200 millones de personas viven en la pobreza en todo el mundo, y unas dos terceras partes de ellas se encuentran en la región de Asia y el Pacífico. Según cifras de la OIT, en esta región viven unos 127 millones de los 246 millones de niños de entre 5 y 14 años de edad que trabajan en todo el mundo. Además, muchos de los 20 millones de trabajadores en régimen de servidumbre que hay en el mundo viven en esta región, mientras que numerosos países informan que existe discriminación en el lugar de trabajo por motivos de género, raza, casta, edad, creencias religiosas y opiniones políticas. La OIT estima que en la próxima década, en la región de Asia y el Pacífico harán falta más de 350 millones de empleos decentes.

La OIT y el BAD también debatieron sobre las normas del trabajo de los sectores público y privado como parte de la responsabilidad social de las empresas. Los detalles sobre cómo llevar a cabo auditorías sociales -como las que efectúan actualmente Responsabilidad Social Internacional o empresas privadas de auditoría- fueron objeto de examen por representantes de alto nivel de organizaciones de empleadores, sindicatos y otras organizaciones.

El impulso para mejorar las normas del trabajo está contando con el apoyo de muchos países, organizaciones para el desarrollo, empresas y organizaciones de la sociedad civil.

La OIT y el BAD concertaron un acuerdo en mayo de 2002 para reforzar la cooperación y maximizar la utilización de los escasos recursos y sus efectos sobre el desarrollo. Entre otras cosas, la cooperación de ambas Organizaciones consistirá en: intercambiar documentación, estudios, investigaciones y prácticas óptimas para promover la cooperación y la complementariedad de las operaciones; combinar los conocimientos técnicos del BAD y de la OIT para asegurarse de que el BAD apoye modelos de un desarrollo integrador y generador de empleos y fomente el bienestar de los trabajadores; colaborar en la elaboración de un marco cooperativo entre los ministros, las organizaciones de empleadores y de trabajadores, los interlocutores de la sociedad civil y las instituciones para el desarrollo en las que el BAD tiene previsto intervenir para tratar cuestiones de protección social; cooperar en la aplicación de actividades crediticias y no crediticias financiadas por la BAD en esferas de su competencia y capacidad tales como la asistencia técnica consultiva y la preparación de proyectos, a nivel regional; y trabajar conjuntamente en las misiones de diseño y examen de proyectos del BAD mediante consultas interorganismos y recurriendo a los servicios de expertos de la OIT.

"Esto no significa que hay que obligar a los países en desarrollo a adoptar reglamentaciones y protecciones que limitan la flexibilidad, la competitividad y el crecimiento", declaró el Sr. Swepston. "En la práctica, la dificultad consistirá en encontrar en cada caso un nivel apropiado de reglamentación y de protección. Para esto se necesitará un nuevo enfoque a fin de examinar las situaciones y encontrar soluciones a los problemas de pobreza, exclusión y desarrollo."

Nota: Si desea consultar las declaraciones citadas (en inglés), sírvase remitirse a:

www.adb.org/Documents/Events/2002/Core_Labor_Standards/default.asp