Desarrollo económico local

La acción local es esencial para implementar la Agenda 2030

El Fórum mundial sobre el desarrollo económico local, que comienza en Turín el 13 de octubre, será una oportunidad para demostrar que los objetivos de desarrollo sostenible relativos al crecimiento inclusivo y al trabajo decente no son sólo un asunto que concierne a las naciones y las organizaciones internacionales. El desarrollo local y regional también tiene un papel clave que desempeñar. La cooperación Sur-Sur y Triangular es un medio importante para reforzar las capacidades.

Opinión | 13 de octubre de 2015
Por Virgilio Levaggi, Director del Departamento de Alianzas y Apoyo a los Programas Exteriores

Virgilio Levaggi, Director del Departamento de Alianzas y Apoyo a los Programas Exteriores
Los empleos decentes son vitales para la erradicación de la pobreza. La Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, adoptada recientemente, promueve de manera explícita (en el Objetivo 8) “el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos”. No obstante, éste no es un desafío que compete solamente a las naciones y a las organizaciones internacionales, también se precisan soluciones que partan del terreno y estrategias que incorporen el desarrollo económico local (DEL).

El contexto es importante. Diversos factores económicos, sociales, políticos y culturales locales influenciarán y configurarán las estrategias necesarias para superar los numerosos obstáculos que nos impiden ofrecer empleos decentes y un crecimiento inclusivo. Las autoridades locales están en una buena posición para comprender no sólo las dificultades sino también las fuerzas y los recursos para llevar a cabo las tareas que tenemos ante nosotros. Dicho esto, los desafíos son enormes y múltiples: el creciente desempleo, sobre todo entre los jóvenes; el irrespeto de los derechos de los trabajadores; la discriminación y una protección social insuficiente.

Para hacer frente a estos desafíos, el establecimiento de nuevas alianzas es un paso importante. A este respecto, el Fórum sobre el DEL de Turín, es bienvenido porque reúne a las autoridades y las asociaciones locales, las organizaciones internacionales, el sector privado, las organizaciones de empleadores y de trabajadores, y la sociedad civil. La ciudad de Turín ha sido un socio esencial al acoger y financiar esta conferencia.

El Fórum sobre el DEL es también la ocasión de mostrar la participación de la OIT en la cooperación Sur-Sur, la cooperación entre las ciudades y la cooperación triangular. Estos tipos de cooperación generalmente implican a dos o más países en desarrollo en colaboración con un tercero – un gobierno o una organización de un país desarrollado, por ejemplo – que contribuye al intercambio con sus conocimientos y recursos.

DEL: Proporcionar trabajo decente a nivel local

Como ilustrará el 3er Fórum de desarrollo local, la adaptación del Programa de trabajo decente a un contexto local comprende diversas dimensiones: la economía social y solidaria, los empleos verdes, la creación de programas de empleo para los jóvenes, el fortalecimiento del papel del sector privado y garantizar el empleo para los trabajadores migrantes. Todos estos elementos contribuyen a la localización de la creación de empleo y a la promoción del trabajo decente.

Del trabajo informal al formal en los mercados de alimentos de Mozambique

En 2012, a partir del involucramiento del Banco Mundial en la reorganización de los mercados alimentarios de Maputo, Mozambique, la alcaldía hizo un llamado a la memoria institucional de los homólogos en las ciudades de todo el mundo para ayudar a gestionar mejor el impacto sobre los vendedores ambulantes de la capital de este país africano. Gracias a una plataforma, desarrollada en parte por la OIT, y con la cooperación de las autoridades locales de Durban y de las ciudades brasileras Belo Horizonte y Porto Alegre, Maputo logró mejorar sus políticas relativas a la gestión de los espacios públicos y progresar con la formalización de la economía de la venta de alimentos.

Desarrollar la cooperación entre ciudades para el DEL en Chefchaouen, Marruecos

Los principales objetivos de la estrategia de ciudad a ciudad son tres: sensibilizar, fortalecer la capacidad y emprender acciones de promoción conjuntas para poner en práctica los cambios.

Como muchos centros regionales de África del Norte, los 50.000 habitantes de la ciudad marroquí Chefchaouen, a dos horas de distancia al suroeste de Tánger, enfrentan numerosos desafíos al desarrollo. La población es joven (la edad media de Marruecos es de 27 años), con niveles de desempleo persistentemente elevados. En esta región, las mujeres han sido tradicionalmente excluidas de la población activa.

En colaboración con la organización de desarrollo local, Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU) y CGLU África, el Alcalde de Chefchaouen invitó a representantes de ciudades de Senegal, Mali, Túnez, Benin y otros países a compartir sus experiencias con la agencia de desarrollo local a fin de definir las prioridades económicas para su ciudad. La OIT contribuyó a orientar esas prioridades hacia el empleo de los jóvenes y de las mujeres. En respuesta, la táctica utilizada fue la de aprovechar la nueva legislación nacional para crear cooperativas de procesamiento de alimentos. Esto ayudó a impulsar el empleo local y a integrar a las mujeres en la fuerza de trabajo.

Estos tipos de enfoques sirven de plataforma para las asociaciones multilaterales al reunir a dirigentes políticos, técnicos y locales que trabajan directamente con las comunidades y los ciudadanos. También ayuda a mejorar la capacidad institucional y de gestión para planificar de manera más estratégica y para poner en práctica el Programa de Trabajo Decente de la OIT con mayor eficacia y, al mismo tiempo, apoyar y sostener el desarrollo económico local.

El futuro

En vista que las previsiones basadas en las tendencias actuales indican que las ciudades concentrarán a siete de cada diez habitantes del mundo para 2050, el papel de la gobernanza local en la implementación del Programa de Trabajo Decente está sólo destinado a crecer.

Para adaptarse, será necesario adoptar una serie de medidas. La cooperación a través de las fronteras entre las ciudades y las regiones debe ser intensificada. El conocimiento y las soluciones compartidas deben ser facilitadas. Es necesario realizar investigación de campo sobre la eficacia de las políticas para comprender mejor la potencia de la cooperación entre las ciudades.

Las organizaciones internacionales como la OIT tienen una función importante que desempeñar para fomentar esta cooperación y compartir la experiencia sobre el terreno. Hay mucho que hacer en materia de formación, de elaboración de métodos para adaptar el Programa de Trabajo Decente al contexto local y para apoyar los esfuerzos de las autoridades locales para poner en práctica estas políticas.

Asimismo, las redes de desarrollo económico local tienen que dialogar con los responsables políticos a escala nacional e internacional. El trabajo de promoción tiene que ser un proceso bidireccional, en el cual los gobiernos locales son reconocidos como socios fundamentales del desarrollo.

Combinados, estos elementos pueden fortalecer la capacidad de las autoridades locales de fomentar el desarrollo económico en sus comunidades, y de promover una visión de desarrollo sostenible con el trabajo decente en su núcleo.