Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".
Acción comunitaria para luchar contra el trabajo infantil
En Bangladesh, un proyecto de la OIT que trabaja en colaboración con las comunidades locales ha logrado retirar a 2.000 niños del trabajo infantil.
BANGLADESH (OIT Noticias) – En un día cualquiera, en las remotas comunidades rurales de Rangpur, en el noroeste de Bangladesh, se pueden ver personas que se dirigen a sus actividades cotidianas: trabajar, hacer las compras, niños que juegan. Pero si se observa más atentamente, también se pueden ver niños trabajando, en puestos de té, obras en construcción, granjas, fábricas de ladrillos y en la pesca.
Estos niños trabajadores ponen de manifiesto las dificultades que muchas familias enfrentan en la región, la más pobre del país.
Obligados a trabajar para contribuir con los ingresos de la familia, a estos niños les queda poco tiempo para ir a la escuela.
La edad mínima para trabajar en Bangladesh es 14 años. A los menores de 18 años no les está permitido realizar trabajos peligrosos que representen un riesgo para su salud o seguridad. No obstante, las leyes no han evitado que los niños trabajen.
A fin de ayudar a las familias de estos niños, el Departamento de Trabajo de Estados Unidos financió el proyecto CLEAR (2013 a 2018). El proyecto ayuda a los países a combatir el trabajo infantil a través del desarrollo de la legislación, el fortalecimiento de su aplicación y la mejora de la capacidad de supervisión.
La mayor dificultad que el proyecto tuvo que enfrentar en las comunidades seleccionadas fue que en las zonas rurales numerosos lugares de trabajo son inaccesibles a los inspectores del trabajo debido a la falta de infraestructura, la naturaleza informal de gran parte del trabajo y los limitados recursos.
A fin de superar estos obstáculos, el proyecto trabajó en colaboración con miembros influyentes de la comunidad como líderes religiosos y maestros para establecer los Grupos voluntarios de supervisión del trabajo.
En un año y medio se crearon un total de 144 grupos en 45 Uniones rurales (zonas administrativas) en todo el noroeste de Bangladesh. Estos grupos contaron con el apoyo de jóvenes voluntarios quienes identificaron a los niños trabajadores en sus comunidades y los retiraron de los lugares de trabajo.
Gracias al apoyo del proyecto CLEAR, estos voluntarios consiguieron retirar a 2.000 niños del trabajo infantil.
Además, como resultado del proyecto, el Gobierno de Bangladesh asignó mayores fondos para hacer frente al trabajo infantil y facilita el acceso de las familias vulnerables a la protección social.
El trabajo infantil estaba en todas partes. No lo sabíamos y no interveníamos. Hoy día, todas las familias saben que no deberían enviar a sus hijos a trabajar."