GINEBRA (OIT Noticias) - Fatih Başer, de 35 años, trabaja como traductor en Estambul. Como a mucha gente en Turquía, a Baser no le resultaba fácil encontrar medicinas fiables a un precio razonable.

“En nuestro país existe el riesgo que los productos que se venden en los mercados sean adulterados”, dijo Başer a OIT Noticias. “Además, el precio de las medicinas y de otros productos ha aumentado, lo que empeora la situación”.

Pero hace algunos años Başer tuvo la suerte de encontrar una pequeña farmacia que ofrece productos de calidad a un precio conveniente.

“Durante los últimos cinco años he comprado aquí mis medicinas, sobre todo porque confío en el farmacéutico. Si compro en la farmacia cooperativa sé que obtendré el producto original, no un falso, y a un precio asequible”, dijo Başer. La tienda es parte de una red de pequeñas farmacias que está ayudando a cambiar la industria farmacéutica en Turquía.

Abdullah Özyiğit, director de la Asociación de cooperativas de farmacéuticos en Turquía

Abdullah Özyiğit es el director de la Asociación de cooperativas de farmacéuticos en Turquía. Este farmacéutico de 45 años, proveniente de Mersin, una ciudad mediterránea, está orgulloso de lo que ha la asociación logrado desde que fue creada en 1989.

”En la actualidad, tenemos una red de 13.000 farmacias a lo largo de todo el país que ofrece empleo a 40.000 personas. Nuestra reputación se basa en la calidad de nuestro servicio, en especial cuando entregamos a domicilio medicinas que son necesarias con urgencia”, explica Özyiğit.

“Además, todos nuestros farmacéuticos son profesionales formados, y las personas aprecian el hecho de que pueden solicitar un consejo confiable y evitar comprar productos que pueden ser muy dañinos para su salud”.

Una empresa que se adapta a los cambios

En Turquía, a finales de los años 1970, el suministro de medicinales dependía en gran parte de la importación. Los mayoristas sólo querían trabajar con las farmacias que podían pagar en divisa extranjera, que en ese momento escaseaba. “En aquél entonces muchas farmacias tuvieron que cerrar”, recuerda Özyiğit.

Esto fue lo que dio origen a la Asociación de cooperativas de farmacéuticos. Hoy día, las pequeñas farmacias pueden trabajar en colaboración con otras y beneficiarse de poder adquisitivo colectivo de las cooperativas.

Debido a que las cooperativas no están guiadas por las ganancias, una parte de los ingresos es distribuida entre los empleados, los cuales reciben mejores prestaciones sociales de las que obtiene la mayoría de los trabajadores en Turquía.

La asociación y sus cooperativas fueron puestas a prueba durante la crisis económica mundial, que afectó gravemente a Turquía, pero la superaron relativamente bien.

“La crisis nos afectó ya que los clientes compraban menos, pero logramos conservar nuestra cuota de mercado, en parte porque proporcionamos formación sobre gestión financiera a nuestros miembros para ayudarlos a mantenerse a flote... En algunos casos, también les sugerimos que vendieran otros productos a fin de mantener su actividad”, dijo Özyiğit.

Además, las cooperativas lograron reducir considerablemente el gasto energético de sus miembros al negociar descuentos importantes del precio del combustible. De nuevo, esto fue posible gracias a su poder adquisitivo colectivo.

Es posible hacer más

Özyiğit cree que las cooperativas son relativamente poco conocidas.

“Las cooperativas son un excelente modelo que nuestro gobierno debería promover más”, declaró. “Si esto sucede, las cooperativas podrían extenderse a otras áreas como la agricultura, la salud, la educación y los seguros”.

En Turquía hay casi 85.000 cooperativas con 8,1 millones de miembros.

“El ejemplo de las cooperativas de farmacéuticos en Turquía es una historia que podría inspirar a otros países que aún tienen dificultades para suministrar a la población medicamentos confiables y asequibles”, señaló Simel Esim, Directora del Sector de Cooperativas de la OIT.

“El Año Internacional de las Cooperativas que finalizará el 19 y 20 de noviembre en Nueva York ofreció al mundo la oportunidad de destacar el trabajo realizado por millones de cooperativas. Estas asociaciones pueden sacar a relucir las mejores cualidades de los seres humanos. En estos tiempos de crisis y cambios, pueden significar una enorme diferencia en la vida de las personas”, concluyó.

ILO guidelines to promote cooperatives

Recomendación 193 sobre la promoción de las cooperativas (2002) ofrece orientación sobre las políticas y la legislación en materia de cooperativas y destaca la necesidad de instaurar igualdad de condiciones para las cooperativas y otras empresas. Más de 70 países han revisado su legislación sobre cooperativas desde la adopción de la Recomendación hace diez años, en conformidad con sus disposiciones. La segunda edición de “Guidelines for Cooperative Legislation” (Directrices sobre legislación de las cooperativas) es una herramienta útil para promover las cooperativas ya que se basa en las últimas informaciones disponibles en materia de legislación. La tercera edición estará disponible dentro de poco.