Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

Asbestos: una amenaza en estado latente

La OIT estima que 100.000 personas mueren cada año a causa de trabajos vinculados a la exposición al asbesto. El cáncer ocasionado por el asbesto provocará la muerte de al menos 15.000 personas en los próximos cinco años en Japón, y de más de 100.000 personas en Francia en los próximos 20 ó 25 años. En Estados Unidos, desde los años '70 han sido presentadas cientos de miles de denuncias por muertes, cáncer y problemas de salud relacionados con la exposición al asbesto, causando la bancarrota de numerosas compañías.

Artículo | 19 de enero de 2006
GINEBRA (OIT EnLínea) - Ocurre cada día en algún lugar de Europa: un edificio construido en los años '70 es demolido. Un grupo de niños en su camino de regreso a casa se detiene a observar el trabajo del enorme bulldozer. La máquina ya está destruyendo la planta baja, y aparentemente nadie ha notado los paneles de asbesto...

Por un instante, una gran cantidad de fibras de asbesto son transportadas por el aire. Las fibras son diminutas y se respiran con facilidad. Su resistencia a los solventes químicos permite que perduren en el tiempo, quizás indefinidamente cuando se instalan en los pulmones. Sus efectos dañinos se evidencian sólo después de décadas de permanecer en estado latente.

"En términos generales el asbesto puede producir dos tipos de lesiones en los seres humanos: asbestosis pulmonar, un espesamiento de la estructura alveolar de los pulmones o en su mucosa pleural, y cáncer de los pulmones o la laringe, incluyendo mesotelioma, el más maligno de los tumores causados por el trabajo", explicó Jukka Takala.

Aunque el uso y la producción de asbesto fue prohibida porla Unión Europea de 15 miembros, y de que los nuevos países miembros seguirán esta disposición, el hecho que esta sustancia pueda seguir siendo una amenaza debido a su capacidad para permanecer en estado latente explica por qué el tema ocupa aún los primeros lugares de la agenda política de muchos países industrializados.

En octubre de 2005, un informe del Senado francés acusó al gobierno de no dar respuesta adecuada al problema de la contaminación por asbesto en el país, que tiene como consecuencia un aumento de las muertes por cáncer atribuidas a este compuesto.

"Mientras entre 1965 y 1995 pueden ser atribuidas al asbesto 35 mil muertes, en los próximos 20-25 años se temen entre 60 y 100 mil muertes", explica el informe. Consecuencia de los largos períodos en estado latente, típicos del cáncer al pulmón ocasionado por asbesto, científicos franceses consideran que las nuevas manifestaciones de sus consecuencias son inevitables e irreversibles, y temen que continúen hasta 2030.

"El asbesto es una de las más importantes, o quizás la más importante, causa de muertes relacionadas con el trabajo, y se está convirtiendo en el mayor desafío a las políticas de salud en el mundo", comentó Jukka Takala.

Tomando en consideración los estudios de la OIT, el Ministerio de la Salud de Japón dió recientemente una cifra estimada del número de muertes que pueden estar relacionadas con el asbesto. Según funcionarios del Ministerio para 2010, el número de decesos a causa de mesotelioma u otro cáncer al pulmón en Japón podría llegar a 15.600.

El Ministerio usará esta cifra para la planificación de leyes que contengan medidas especiales para cubrir los gastos médicos de las personas con enfermedades causadas por el asbesto, e indemnizar a los familiares de las víctimas.

En otros países, la OIT estima que en los Estados Unidos más de 21.000 personas mueren cada año a causa de cáncer al pulmón y mesotelioma provocados por el asbesto, más de 10.000 en la Federación Rusa, y más de 110.000 en China. En Europa Occidental, América del Norte, Japón y Australia, se estima que cada año el asbesto causa 20.000 nuevos casos de cáncer al pulmón y 10.000 casos de mesotelioma.

Hacía una prohibición mundial del asbesto

La Resolución de la UE sobre la protección de trabajadores a riesgo por exposición al asbesto (83/477/EEC, modificada en marzo 2003) y el Convenio de la OIT No.162 relacionado con la Seguridad en el Uso de Asbestos adoptada en 1986 han reducido a la mitad la producción mundial de asbesto desde los años '70.

"A pesar de ello, el asbesto sigue ocupando el primer lugar como agente cancerígeno en el mundo del trabajo", dijo Jukka Takala. "El problema no ha sido resuelto, más bien se ha trasladado. En los países en transición y desarrollo el riesgo ahora es aún mayor que en las economías estables de mercado, y existe la certeza de que el asbesto será una 'bomba de tiempo' sanitaria para esos países los próximos 20 a 30 años".

En los países en desarrollo, el uso de asbestos aumentó en las últimas tres décadas del siglo XX, mientras que Estados Unidos y otros países industrializados estaban abandonando el uso de la sustancia.

Juka Takala cita la industria de desmantelamiento de barcos en Asia como un ejemplo relevante. "Un barco que es desmantelado en Bangladesh u otro lugar contiene un promedio de seis toneladas de asbesto. Casi todo el material del barco es reciclado, incluyendo el asbesto. El reciclaje de productos seguros no constituye ningún peligro, pero romper y reempacar asbesto de los barcos sin ninguna medida de protección es inaceptable", dijo.

La OIT ofrece diversas soluciones al reto de asbestos basada en parámetros internacionales (Convenios, (Recomendaciones, repertorios de recomendaciones prácticas). Los Convenios de la OIT, 139, 148, 162 y 170 sobre cáncer profesional, ambiente de trabajo, seguridad en el uso de asbesto, y seguridad en el uso de químicos han recibido 116 ratificaciones por parte de los Estados miembros de la OIT.

Estos Convenios proporcionan una sólida base técnica y legal para la protección de los trabajadores contra la exposición dañina al asbesto al prescribir medidas preventivas exhaustivas al nivel nacional y empresarial. La OIT utiliza otros medios de acción para intensificar los esfuerzos en la prevención contra las enfermedades relacionadas con el asbesto, como el intercambio de conocimientos y experiencias, difusión de la información, asistencia técnica directa y actividades de cooperación técnica.

"Estamos muy lejos aún de la prohibición global del uso y la producción de asbesto. 27 países ratificaron el Convenio 162 de la OIT sobre la seguridad del uso de asbesto" dijo Jukka Takala, y agregó que entre estos países se encuentran 15 de la UE, Argentina, Australia, Chile, Croacia, Hungría, Noruega, Polonia, Arabia Saudita, Eslovenia y Suiza.

"Trasladar el riego a otros lugares no es coherente con una globalización justa que ofrece oportunidades para todos. Extender la prohibición de asbesto a todos los países del mundo, es un reto difícil, pero importante. Para alcanzar este objetivo, la comunidad internacional debe proveer conocimientos y asistencia para ayudar a enfrentar las medidas de reestructuración necesarias, crear puestos de trabajo alternativos y promover el uso de sustitutos del asbesto en todo el mundo", concluyó Jukka Takala.