Turismo sostenible e inclusivo
La OIT presentó una estrategia para la recuperación de uno de los sectores más afectados por la pandemia
La Oficina de País de la Organización Internacional del Trabajo para la Argentina dio a conocer los resultados de un estudio enfocado en la recuperación de la actividad turística y sus posibilidades para el desarrollo, un plan especial para tres localidades emergentes.
(Buenos Aires, OIT Argentina) — Impulsada por la Oficina de País de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la Argentina, junto a sus mandantes tripartitos, una reciente investigación aporta evidencia para la recuperación del turismo, uno de los sectores más afectados por la crisis generada por la COVID-19.
Se trata El sector del turismo en la Argentina. Efectos de las políticas sobre el empleo, una publicación elaborada desde el proyecto “Turismo sostenible e inclusivo para la generación de empleo” de la OIT, cuyos resultados fueron presentados recientemente, que contiene estudios focalizados, diagnósticos, cursos y entrevistas, entre otros recursos, además de programas e ideas que pueden ser aplicadas en cualquier contexto.
El documento, asimismo, comprende tres planes especialmente diseñados, en un marco de amplio diálogo social, para las localidades de El Soberbio, en Misiones, El Chaltén en Santa Cruz y Libertador General San Martín en Jujuy, que irrumpen como destinos de futuros promisorios.
Las ciudades seleccionadas contarán ahora con una importante herramienta para enfrentar los desafíos post crisis y aumentar su resiliencia a eventuales nuevos shocks.
Las medidas de aislamiento por la COVID-19, sumadas al cierre de fronteras y la suspensión del transporte aéreo paralizaron la actividad turística drásticamente, generando una fuerte caída del empleo con efectos devastadores en las economías locales que, como siempre ocurre, golpearon con más fuerza a los trabajadores informales y no registrados, pequeñas empresas, mujeres, jóvenes y pueblos originarios, entre otros.
Es por eso que, en la actualidad, el panorama de recuperación es único, según explicó Yukiko Arai, directora de la OIT Argentina: “Es un desafío histórico que tiene que ver con la necesidad de formalizar y generar empleo de calidad en uno de los sectores con más impacto en las economías regionales”.
“Buscamos promover y acompañar el gran potencial del sector para la creación de empleo decente, inclusión social y sostenibilidad cultural y ambiental”, señaló Arai.
Así, en acuerdo con el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, comenzó a implementarse el proyecto, que combinó la creación de nuevos conocimientos y experiencias con un proceso participativo entre actores claves del sector y de las tres localidades escogidas.
Más de 80 funcionarios y funcionarias de todo el país (de los tres niveles de gobierno, nacional, provincial y municipal), así como representantes de empleadores y sindicatos, se capacitaron en cuestiones aplicables a la gestión política relacionadas a la reactivación, el desarrollo local y la planificación apuntando a dejar capacidades instaladas para la generación de insumos, el diseño o la puesta en marcha de planes propios.
Participaron representantes de los ministerios nacionales de Turismo y Deportes, Trabajo, Empleo y Seguridad Social y Ambiente y Desarrollo Sostenible; de las cámaras Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEGHRA) y la Unión Industrial Argentina (UIA), de las centrales sindicales CGT, CTA Autónoma, CTA de los Trabajadores y la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA); junto a delegados de Naciones Unidas por UNESCO y ONU Mujeres.
El Centro Internacional de Formación radicado en Turín fue el encargado de brindar los talleres Turismo Sostenible, Responsable e Inclusivo postpandemia; Turismo Sostenible y Desarrollo Local en Áreas Rurales; y Planificación Estratégica Participativa para el Turismo Sostenible e Inclusivo en Destinos Emergentes, y además coordinó la elaboración de la Guía para la Planificación Estratégica Participativa del Turismo en Destinos Emergentes.
Mediante la incorporación de los equipos provinciales no ligados a los destinos del proyecto se consolidó un proceso que visibiliza lo que implica el turismo sostenible e inclusivo post COVID, brindando nuevos conocimientos sobre estrategias y medidas de recuperación.
“Esta herramienta les permitirá llevar adelante el plan y apropiárselo una vez que el proyecto finalice”, destacó Arai.
Por otra parte, también se realizó el curso “Genere, Inicie y Mejore su negocio” para emprendedores, con el fin de llegar al territorio, principalmente a la cadena de valor y suministro local más vulnerable en los tres destinos seleccionados. En total, 33 personas completaron sus planes de negocios: en su mayoría fueron mujeres (el 80 por ciento), de las cuales un 36 por ciento pertenecía a comunidades indígenas y un 20 por ciento eran personas desempleadas.
“Quienes participaron evalúan la experiencia como un aprendizaje destacado y han valorado el hecho de poder plasmar en un documento escrito un plan como guía para encarar su propio proyecto de negocio”, sintetizó la directora.
El Soberbio había sido alcanzado por el Plan de Auxilio, Capacitación e Infraestructura para el Turismo del gobierno argentino y por el programa de OIT. Se trata de una localidad misionera ubicada en la reserva de Yabotí, relacionada con las comunidades originarias guaraníes en un territorio de conexión binacional, lo cual le agrega oportunidades y desafíos.
Por su parte, Libertador San Martín compone la biósfera del yungas jujeño cercana al Parque Nacional Calilegua. Presenta inconvenientes de conectividad digital, dificultades ambientales por la existencia de basurales y una actividad productiva centrada en los cultivos que el turismo podría ayudar a diversificar.
A diferencia de los otros dos pueblos, El Chaltén, en la Huella de los Glaciares, es una localidad consolidada en su desarrollo turístico y muy dependiente del turismo receptivo, lo que en épocas de contracción puede representar un problema. En la zona, la actividad es de una altísima estacionalidad que afecta al empleo.
Ahora, los planes “permitirán garantizar condiciones de trabajo adecuadas considerando la sustentabilidad ambiental”, sintetizó Yukiko Arai.
Se trata El sector del turismo en la Argentina. Efectos de las políticas sobre el empleo, una publicación elaborada desde el proyecto “Turismo sostenible e inclusivo para la generación de empleo” de la OIT, cuyos resultados fueron presentados recientemente, que contiene estudios focalizados, diagnósticos, cursos y entrevistas, entre otros recursos, además de programas e ideas que pueden ser aplicadas en cualquier contexto.
El documento, asimismo, comprende tres planes especialmente diseñados, en un marco de amplio diálogo social, para las localidades de El Soberbio, en Misiones, El Chaltén en Santa Cruz y Libertador General San Martín en Jujuy, que irrumpen como destinos de futuros promisorios.
Las ciudades seleccionadas contarán ahora con una importante herramienta para enfrentar los desafíos post crisis y aumentar su resiliencia a eventuales nuevos shocks.
Las medidas de aislamiento por la COVID-19, sumadas al cierre de fronteras y la suspensión del transporte aéreo paralizaron la actividad turística drásticamente, generando una fuerte caída del empleo con efectos devastadores en las economías locales que, como siempre ocurre, golpearon con más fuerza a los trabajadores informales y no registrados, pequeñas empresas, mujeres, jóvenes y pueblos originarios, entre otros.
Es por eso que, en la actualidad, el panorama de recuperación es único, según explicó Yukiko Arai, directora de la OIT Argentina: “Es un desafío histórico que tiene que ver con la necesidad de formalizar y generar empleo de calidad en uno de los sectores con más impacto en las economías regionales”.
“Buscamos promover y acompañar el gran potencial del sector para la creación de empleo decente, inclusión social y sostenibilidad cultural y ambiental”, señaló Arai.
Así, en acuerdo con el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, comenzó a implementarse el proyecto, que combinó la creación de nuevos conocimientos y experiencias con un proceso participativo entre actores claves del sector y de las tres localidades escogidas.
Más de 80 funcionarios y funcionarias de todo el país (de los tres niveles de gobierno, nacional, provincial y municipal), así como representantes de empleadores y sindicatos, se capacitaron en cuestiones aplicables a la gestión política relacionadas a la reactivación, el desarrollo local y la planificación apuntando a dejar capacidades instaladas para la generación de insumos, el diseño o la puesta en marcha de planes propios.
Participaron representantes de los ministerios nacionales de Turismo y Deportes, Trabajo, Empleo y Seguridad Social y Ambiente y Desarrollo Sostenible; de las cámaras Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEGHRA) y la Unión Industrial Argentina (UIA), de las centrales sindicales CGT, CTA Autónoma, CTA de los Trabajadores y la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA); junto a delegados de Naciones Unidas por UNESCO y ONU Mujeres.
El Centro Internacional de Formación radicado en Turín fue el encargado de brindar los talleres Turismo Sostenible, Responsable e Inclusivo postpandemia; Turismo Sostenible y Desarrollo Local en Áreas Rurales; y Planificación Estratégica Participativa para el Turismo Sostenible e Inclusivo en Destinos Emergentes, y además coordinó la elaboración de la Guía para la Planificación Estratégica Participativa del Turismo en Destinos Emergentes.
Mediante la incorporación de los equipos provinciales no ligados a los destinos del proyecto se consolidó un proceso que visibiliza lo que implica el turismo sostenible e inclusivo post COVID, brindando nuevos conocimientos sobre estrategias y medidas de recuperación.
“Esta herramienta les permitirá llevar adelante el plan y apropiárselo una vez que el proyecto finalice”, destacó Arai.
Por otra parte, también se realizó el curso “Genere, Inicie y Mejore su negocio” para emprendedores, con el fin de llegar al territorio, principalmente a la cadena de valor y suministro local más vulnerable en los tres destinos seleccionados. En total, 33 personas completaron sus planes de negocios: en su mayoría fueron mujeres (el 80 por ciento), de las cuales un 36 por ciento pertenecía a comunidades indígenas y un 20 por ciento eran personas desempleadas.
“Quienes participaron evalúan la experiencia como un aprendizaje destacado y han valorado el hecho de poder plasmar en un documento escrito un plan como guía para encarar su propio proyecto de negocio”, sintetizó la directora.
De norte a sur
Los destinos fueron seleccionados por el Ministerio de Turismo de la Nación. El trabajo de selección estuvo basado en la diversidad y en la posibilidad de que sean replicables en una escala mayor.El Soberbio había sido alcanzado por el Plan de Auxilio, Capacitación e Infraestructura para el Turismo del gobierno argentino y por el programa de OIT. Se trata de una localidad misionera ubicada en la reserva de Yabotí, relacionada con las comunidades originarias guaraníes en un territorio de conexión binacional, lo cual le agrega oportunidades y desafíos.
Por su parte, Libertador San Martín compone la biósfera del yungas jujeño cercana al Parque Nacional Calilegua. Presenta inconvenientes de conectividad digital, dificultades ambientales por la existencia de basurales y una actividad productiva centrada en los cultivos que el turismo podría ayudar a diversificar.
A diferencia de los otros dos pueblos, El Chaltén, en la Huella de los Glaciares, es una localidad consolidada en su desarrollo turístico y muy dependiente del turismo receptivo, lo que en épocas de contracción puede representar un problema. En la zona, la actividad es de una altísima estacionalidad que afecta al empleo.
Ahora, los planes “permitirán garantizar condiciones de trabajo adecuadas considerando la sustentabilidad ambiental”, sintetizó Yukiko Arai.