Panorama Laboral 2004

El estudio de la OIT pone de relieve la importancia de la productividad laboral en la creación de empleos y la lucha contra la pobreza, y sostiene que los costos laborales tienen una incidencia poco significativa en la competitividad internacional de las empresas.

Noticia | 29 de noviembre de 2006

Productividad laboraral en América Latina es la misma que hace veinte años.
El estudio de la OIT pone de relieve la importancia de la productividad laboral en la creación de empleos y la lucha contra la pobreza, y sostiene que los costos laborales tienen una incidencia poco significativa en la competitividad internacional de las empresas.

La productividad laboral en América Latina es hoy similar a la de 1980, lo que significa según un estudio de la Oficina Internacional del Trabajo (OIT)-, que a menos que se corrijan los factores que impiden una mayor productividad de las empresas y los países, las posibilidades de progreso de la región continuarán siendo las mismas que hace dos décadas.

El informe de la OIT Panorama Laboral 2004, América latina y el Caribe*, examina el papel de la productividad laboral en la creación de prosperidad así como sus vínculos con la generación de empleo y la reducción de la pobreza. El estudio entra en un nuevo territorio de análisis al argumentar que la productividad del trabajo- que se suele expresar como la relación entre el valor total de los bienes y servicios producidos en un país y los insumos laborales utilizados en esa producción- representa uno de los mecanismos de transmisión más importantes del crecimiento al bienestar. “La paradoja del crecimiento sin bienestar observada en América Latina durante las últimas décadas -dice el informe-parece tener bastante relación con el hecho de que el producto por trabajador no se ha recuperado lo suficiente después de la caída que experimentó en los años ochenta.”

Con el objeto de ilustrar la baja productividad laboral en la región, el informe de la OIT establece algunas comparaciones con economías o regiones más desarrolladas. De acuerdo con las cifras del estudio, en América Latina un trabajador genera un nivel de producción cercano a 10,500 dólares anuales, mientras que en Estados Unidos, Japón y Europa la producción está organizada de manera que el producto por trabajador supera los 40,000 y hasta los 50,000 dólares. Así en América Latina el monto promedio de la producción por trabajador alcanzaría para una remuneración mensual de un poco más de 430 dólares; en EE.UU., por ejemplo, casi el 70% de lo producido va hacia la retribución de la mano de obra.

El indicador más utilizado para reflejar el crecimiento económico de un país -explica el estudio - es el producto por habitante, que guarda una estrecha relación con la productividad laboral. En América latina, el producto por habitante en 2002 se aproximó a los 3,900 dólares constantes de 1995 mientras que en Estados Unidos fue casi 10 veces ese valor. “El nivel tan bajo del producto por habitante-constata el informe-refleja el rezago regional en términos de desarrollo económico”.

De acuerdo con el nivel de producto por habitante en 2002, se destacan Argentina, Chile y Uruguay, seguidos por Brasil, Costa Rica y México. El documento advierte el gran esfuerzo que requeriría a países como Bolivia, Honduras, Nicaragua y Paraguay sólo para acercarse al promedio regional. El estudio destaca el hecho de que aquellos países por encima del promedio de producto por trabajador de la región (más de 10,000 dólares) tienen tasas de pobreza menores al 50% de la población; en cambio la mayoría de aquellos donde el producto por trabajador está debajo de este promedio se observan tasas de pobreza superiores al 60 %.

Al constatar evidencias internacionales que permiten relacionar productividad con bienestar, el informe pone de relieve la necesidad de romper el enfoque que asocia a la productividad sólo con eficiencia y reducción de costos o con explotación laboral. “Es necesario- subraya la OIT- concentrarse en la productividad del trabajo como medio sostenible para el crecimiento y el desarrollo humano ...El impulso de la productividad debe y puede beneficiar a trabajadores y empleadores, siempre que se incorporen los criterios de eficiencia y calidad, que implica la concepción moderna de la productividad”. Costos laborales, competitividad y productividad laboral

Al analizar la relación entre costos laborales, competitividad y productividad laboral, el informe de la OIT argumenta que mientras la productividad laboral es un factor determinante en la competitividad internacional de las empresas, los costos laborales parecen serlo en mucha menor medida. “Si bien la reducción de costos- dice el estudio es una alternativa que puede generar resultados en el corto plazo, una opción más sostenible en el largo plazo es la diferenciación de la producción y la forma de producir”. El informe señala como ejemplo que países como Colombia, Perú y Venezuela que destacan por los menores niveles de competitividad global en relación con Brasil, Chile o México, presentan al mismo tiempo un menor costo laboral unitario que estos países. “Se observa que la mayoría de los países con más alta competitividad a nivel internacional no sustentan esta condición exclusivamente en el costo de la mano de obra”, analiza el estudio.

La OIT llama a considerar la productividad laboral desde una perspectiva más amplia que integre la participación de una mano de obra de calidad, métodos de organización de trabajo que promuevan la creatividad, mejores prácticas laborales, mecanismos institucionales para apoyar a las empresas y un contexto económico y social que fomente la innovación y el buen desempeño de los negocios.