Movimiento sindical

Sharan Burrow: ¿Qué retos y oportunidades se presentarán a los sindicatos en 2017?

Algunos de los temas más destacados que deberá abordar el movimiento sindical en 2017 son: cómo se puede mejorar la afiliación sindical de las mujeres y cuáles son las prioridades de los sindicatos en relación con el debate sobre el futuro del trabajo. En la siguiente entrevista, Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional (CSI), hace un repaso de los principales logros del movimiento sindical en 2016 y destaca los retos y oportunidades para los sindicatos en 2017.

Noticia | 30 de enero de 2017
Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional (CSI)
ACTRAV INFO: en 2016, ¿cuáles fueron los principales logros del movimiento sindical internacional y en qué ámbitos es necesario seguir mejorando?

Sharan Burrow:
a pesar de que 2016 fue un año turbulento para la política internacional, con una economía mundial aún muy debilitada, una desigualdad que alcanzó niveles históricos y un conflicto que causó enormes pérdidas de vidas y obligó a millones de personas a abandonar sus hogares, los sindicatos de todo el mundo siguieron obteniendo resultados concretos e importantes para los trabajadores. En el plano internacional, fue un año muy intenso con muchos logros y también muchos retos por delante.

El Congreso de la CSI, celebrado en Berlín en 2014, reconoció que, para afianzar el poder de los trabajadores, los sindicatos debían fortalecer la afiliación y nos pidió que diéramos a esta un lugar central en toda nuestra labor, haciendo campaña por el trabajo decente, construyendo el "andamiaje" internacional necesario para la afiliación y capacitando a los afiliadores sindicales a fin de que adquieran las competencias y la capacidad estratégica indispensables para ayudar a los trabajadores a sindicarse. En 2016, la Academia de Organización de la CSI capacitó, en total, a 539 organizadores de unos 50 países, 140 de los cuales se centraron específicamente en los trabajadores jóvenes. Nuestra actividad de Nuevos Frentes sobre las cadenas mundiales de suministro permitió revelar el escándalo en 50 de las mayores empresas del mundo que emplean un 94% de mano de obra oculta sin relación directa con la multinacional propiamente dicha y cuyos directores generales no admiten su responsabilidad hacia las personas que generan la riqueza para los accionistas. Se ha adoptado un firme compromiso público en esta campaña y un número cada vez mayor de directores generales reconoce esta explotación e incluso la esclavitud en sus cadenas de suministro, por ende debemos mantener la presión para que los empleadores asuman su responsabilidad a lo largo de todas las cadenas de suministro. Asimismo, en el G20 bajo el liderazgo de la Canciller Merkel, pudimos ver que los políticos han comenzado a aceptar que el imperio de la ley y la debida diligencia deben aplicarse no solo en el país sino también fuera de sus fronteras, dando una base sólida para el progreso en esta cuestión.

En 2016 se logró concretar una demanda sindical fundamental en torno al cambio climático, lo que permitió adoptar formalmente la transición justa en las conversaciones sobre el cambio climático celebradas en París y Marrakech. Hoy hemos establecido un centro de transición justa para ofrecer asesoramiento, promoción y conocimientos especializados en materia de políticas mientras los sindicatos buscan negociar la transición hacia un mundo sin emisiones de carbono y sin pobreza. Esto está, por supuesto, estrechamente vinculado con nuestro trabajo en torno al desarrollo sostenible, basándose en el modelo de trabajo decente como objetivo político central, que ofrecen los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Gracias al énfasis que hemos puesto en la esclavitud moderna, hemos podido galvanizar un masivo apoyo y, a pesar de la resistencia en particular de algunos países del Golfo, tanto los gobiernos como los empleadores saben hoy que el mundo está observando y está dispuesto a actuar para acabar con el trabajo forzado dondequiera que exista. El mundo del deporte no es inmune a esta situación, y la denuncia de violaciones flagrantes de los derechos de los trabajadores relacionados con megaeventos deportivos ha llevado a crear una plataforma para los derechos humanos y los megaeventos en el deporte, en la que se ha creado una colaboración histórica entre sindicatos, organismos deportivos, empleadores, grupos de derechos humanos y anticorrupción, así como la OIT y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. A través de esto, queremos poner punto final a las repetidas violaciones cada vez que se organiza un evento deportivo mundial. Además, gracias a las diez ratificaciones del protocolo del Convenio núm. 29, que ha entrado ya en vigor, disponemos de un poderoso instrumento y del impulso necesario para avanzar en la lucha por acabar con la esclavitud.
El programa de la CSI "Países en situación de riesgo" nos ha permitido afinar y centrar la acción internacional en torno a aquellos países donde se cometen más infracciones. La presión mantenida sobre estos gobiernos ha llevado en muchos casos a un cambio positivo, aunque quedan todavía muchos retos por delante, dado que algunos gobiernos continúan encarcelando a sindicalistas y los trabajadores siguen enfrentados a la discriminación, la violencia física e incluso la muerte simplemente por defender sus derechos. El Índice Global de Derechos de la CSI se ha convertido en una referencia clave, que muestra las violaciones y documenta las tendencias, como por ejemplo la agravación de la situación en muchos países europeos. A nivel mundial, casi el 50% de los países ha promulgado restricciones legislativas o reglamentarias a los derechos y libertades democráticos, lo que ha reducido el espacio cívico y socavado la libertad de asociación.

La defensa de la desigualdad en el plano mundial, el fracaso de las políticas de austeridad, las deficiencias en el sistema de comercio internacional y la falta de creación de empleos fueron aspectos fundamentales para nuestro trabajo en 2016. Se reconoce ampliamente que la desigualdad es un problema en la gran mayoría de los países, aunque las instituciones financieras internacionales deben aprender aún la lección, a pesar de las advertencias de sus propios investigadores. Las deficiencias en muchos acuerdos comerciales, cuyas negociaciones eran mantenidas en secreto, se encuentran bajo los proyectores, incluyendo el Acuerdo sobre el Comercio de Servicios que se expuso en nuestro informe el año pasado como otra receta para la codicia corporativa y una mala noticia para los trabajadores. Por lo tanto, 2016 se considerará un año en el que la gente se ha rehusado a aceptar este tipo de acuerdo, aunque las soluciones populistas que se proponen tampoco son mejores. En 2016 emprendimos la lucha por los salarios mínimos y acelerar esa campaña será primordial para las familias de los trabajadores, así como para combatir la desigualdad y devolver la demanda a la economía global reforzando el poder adquisitivo de una mayoría en lugar de captar la gran riqueza del 1%.

ACTRAV INFO: Uno de los principales retos que se plantea al movimiento sindical es fortalecer la afiliación sindical de las mujeres y su representación en los más altos cargos decisorios. ¿Cómo pueden lograrlo los sindicatos?


La prioridad de la CSI "Cuente con nosotras" es precisamente lograr eso. Ello significa el compromiso directo de unos 150 afiliados con los planes de acción nacionales para que las mujeres forme parte del liderazgo, así como abordar temas de particular interés para las mujeres, de modo que vean al movimiento sindical como algo abierto y pertinente. Fue prioritario hacer campaña para detener la violencia contra las mujeres y obtener buenos resultados en relación con la violencia de género en los debates de la OIT. También publicamos nuestro primer informe que muestra los beneficios sociales y económicos de invertir en la economía del cuidado, ayudando a poner esta cuestión en la mesa. Asimismo, hemos hecho avances en la organización de los trabajadores domésticos y logrando que la FITH alcance los 500.000 miembros y que se reconozca el trabajo doméstico en la legislación laboral. El Convenio núm. 189 de la OIT es fundamental a estos efectos. Se está capacitando a más mujeres como negociadoras y nuevas cláusulas sobre el acoso sexual, los derechos de maternidad, la igualdad de remuneración y el cuidado de los niños se han incorporado a los convenios colectivos en todo el mundo. Todavía queda mucho por hacer para lograr la plena igualdad en el trabajo, en la sociedad y en los sindicatos, y el trabajo específico con respecto a esta prioridad, junto con la incorporación de la dimensión de género en toda nuestra labor, constituirá la base para el progreso.

ACTRAV INFO: En junio de 2017, la migración laboral estará en el centro de los debates en la OIT. ¿Cuáles son sus expectativas con respecto a este debate?


Habida cuenta de las políticas populistas de "nosotros y ellos" que se están convirtiendo en moneda corriente, demonizando a los inmigrantes y los refugiados y haciendo caso omiso de los abrumadores beneficios de las políticas basadas en los derechos, incluido el derecho al trabajo y la igualdad de trato en el lugar de trabajo, para los refugiados y los migrantes, estos temas han pasado a ser primordiales en estos momentos. Estamos buscando un sistema de gobernanza mundial de la migración, en la que los gobiernos nacionales desempeñen su función y la OIT un papel de liderazgo. La contratación justa, el respeto de las normas de la OIT, la lucha contra la trata de personas y hacer frente al discurso populista e incluso fascista serán aspectos esenciales.

ACTRAV INFO: En su opinión, ¿cuáles son los principales retos y oportunidades que tendrán por delante los sindicatos en 2017?

Si bien 2016 fue un año de muchos logros, debemos basarnos en ellos y, en muchos casos, poner en práctica lo dicho y los compromisos asumidos. Por lo tanto, en 2017, haremos campaña, ejerceremos presión y nos organizaremos en torno a los nuevos frentes y prioridades de la CSI que han dominado nuestro escenario de trabajo en 2016. Junto con esto, adoptamos dos iniciativas en la reunión de nuestro Consejo General en Viena en diciembre pasado. El futuro del trabajo será un ámbito clave de nuestra labor en 2017 y hasta nuestro próximo congreso a fines de 2018 en Copenhague. Entablaremos un diálogo con nuestros afiliados y las Federaciones Sindicales Internacionales sobre este gran tema, teniendo en cuenta la regulación, el desarrollo, la transición justa, la negociación sobre la tecnología y la lucha contra la concentración del poder y la erosión de las relaciones laborales que caracterizan la llamada economía de "plataforma". La segunda iniciativa gira en torno a la libertad, la democracia y la paz, cuestiones que están gravemente amenazadas en un mundo cada vez más inestable e impredecible. Esto será objeto de una conferencia internacional que organizaremos en el segundo semestre de 2018.

La CSI, las Federaciones Sindicales Internacionales, el TUAC, nuestros organismos regionales y, lo que es más importante, nuestros afiliados nacionales han alcanzado muchos logros en 2016, y trabajando juntos podemos hacer más y hacerlo mejor el próximo año. Esperamos cooperar con la OIT en este ámbito y, por supuesto, con ACTRAV más particularmente.