Evolución del método de VSTI

La vigilancia y el seguimiento es un ámbito de la labor de erradicación del trabajo infantil en continua evolución que está fuertemente vinculado al cumplimiento de la legislación nacional en materia de trabajo infantil y de las leyes en general. Se ha diseñado, puesto en práctica y comprobado una amplia gama de iniciativas de vigilancia y seguimiento como parte de la labor de lucha en el mundo contra el trabajo infantil que lleva a cabo el Programa IPEC de la OIT.

A partir del sector manufacturero (Bangladesh y Pakistán) se ampliaron la vigilancia y el seguimiento a otros sectores económicos, como la pesca (Indonesia y Filipinas) y la agricultura (América Central y la República Dominicana) y actualmente a todos los campos de intervención del IPEC, incluidos los sectores informales e ilícitos. Últimamente, se han incorporado al diseño de los programas de duración determinada (PDD).

Las primeras iniciativas de vigilancia y seguimiento del trabajo infantil se desarrollaron como respuesta a la presión internacional sobre determinadas industrias de exportación y su principal objetivo fue la vigilancia de los lugares de trabajo. Dos ejemplos muy conocidos son el proyecto de la industria de la confección de Bangladesh (BGMEA), que comenzó en 1995, y el proyecto de la industria de balones de fútbol Sialkot de Pakistán, que comenzó en 1997. Esos proyectos han permitido elaborar herramientas y procedimientos específicos de vigilancia y seguimiento y han sido dirigidos por equipos de supervisión en el lugar de trabajo, compuestos por profesionales y especialistas en la materia.

Estas primeras experiencias pusieron de manifiesto la importancia de estar realizando actividades de protección social al iniciar con la vigilancia y el seguimiento, para proporcionar alternativas viables para los niños que se retire del trabajo. Con los proyectos agrícolas y del café de América Central, se perfeccionó más el concepto de "vigilancia y seguimiento con base en la comunidad". Mediante el empleo de personas locales, como maestros, y de enfoques de sensibilización para impulsar iniciativas, estos proyectos empezaron a demostrar la capacidad de los agentes no tradicionales para vigilar el trabajo infantil.

En los últimos años estas y otras iniciativas han contribuido al desarrollo del concepto de la vigilancia y el seguimiento del trabajo infantil. El enfoque pasó de vigilar la industria a vigilar al niño cuando se le aparta del trabajo y se le proporcionan servicios de protección social, de "retirar" al niño del trabajo a un esfuerzo de protección coordinado que incluye la identificación, remisión, y verificación y el seguimiento de su evolución para asegurarse de que se proporcionan alternativas satisfactorias a los niños que se ha retirado del trabajo, y de vigilar sólo determinados sectores específicos a un enfoque basado en zonas mediante el que se vigilan todos los tipos de trabajo infantil de una determinada zona geográfica.