La OIT presenta una publicación que propone una nueva vision sobre temas laborales

La OIT y la Global Labour University presentarán este jueves una antología de artículos que anuncia un nuevo modo de pensar sobre cuestiones fundamentales, abarca desde respuestas a la crisis económica mundial hasta la globalización, y los derechos de los trabajadores. El libro, titulado “There is an alternative Economic policies and labour strategies beyond the mainstream” (Existe una alternativa. Políticas económicas alternativas y estrategias laborales además más allá de la corriente dominante), será presentado en la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra.

Artículo | 9 de junio de 2011

¿Qué situación atraviesa el trabajo en la actualidad?

La crisis económica y financiera mundial ha tenido un fuerte impacto sobre los salarios, los trabajadores vulnerables y el empleo en general en muchas partes del mundo. Los sindicalistas han intentado participar en el diálogo con empleadores y gobiernos antes, durante y después de la crisis financiera, pero los resultados son heterogéneos. Esta nueva colección de artículos sobre el trabajo en el mundo sostiene que cualquier previsión sobre el comienzo de una nueva era de diálogo ha desvanecido. Muchos de los artículos afirman que el costo de la crisis financiera ha sido trasferido a los trabajadores comunes y a los desempleados, y que la crisis está debilitando aún más el poder y la influencia de los sindicatos.

¿Cuáles son las ideas emergentes de este libro?

El mensaje preponderante es que existen respuestas alternativas a la crisis, opciones diferentes a la reducción de los salarios, a la liberalización de los mercados laborales, a la reducción drástica de los impuestos, y a la privatización de los servicios públicos. Es fundamental, una recuperación impulsada por los salarios a fin de reducir las desigualdades y los desequilibrios mundiales, en particular después de la crisis económica y financiera.

¿Cuáles son algunas de las estrategias alternativas?

Existen muchas, incluyendo la reversión de la tendencia del incremento de las desigualdades y la disminución masiva de los ingresos mediante una mayor seguridad de los ingresos basada en políticas dirigidas a extender el alcance de la negociación colectiva y la introducción de pisos de protección social, así como de los salarios mínimos de subsistencia a nivel nacional. El Director General de la OIT, Juan Somavia, señala en su artículo que los derechos de los trabajadores no están en desacuerdo con el crecimiento económico, y que la aplicación universal de las normas del trabajo sería una contribución importante a una economía mundial bien reglamentada. Un alto nivel de empleo productivo debería ser un objetivo del mismo orden de importancia de una inflación baja y estable y de finanzas públicas en buen estado. El libro también hace un llamado por una legislación del trabajo a nivel nacional universalmente aplicable, al sostener que si los países se esfuerzan en exportar su excedente a expensas del crecimiento de los salarios, crearán enormes desequilibrios mundiales.

¿El libro se concentra en alguna región en particular?

No, analiza tanto la situación mundial como ejemplos específicos. Una sección aborda el impacto de la crisis económica en Europa. Hace un llamado por una política salarial coordinada orientada hacia la reducción de las desigualdades, un comercio más equilibrado y un crecimiento económico sólido. Sostiene que Europa corre el riesgo de colapsar si no introduce cambios. En los países en desarrollo, la intensificación del empleo público, una mejor protección social y la distribución de los “bienes salariales” - como vivienda, salud y educación – se encuentran entre las estrategias que pueden ayudar a alcanzar el crecimiento impulsado por los salarios.

¿Qué acciones han emprendido los trabajadores durante 2011?

El libro dice que los trabajadores en todo el mundo se están movilizando para cambiar la tendencia actual. En los países árabes, están haciendo la historia. Desde Asia hasta Europa y América del Norte, los trabajadores han declarado huelgas y se han movilizado para proteger sus derechos fundamentales, mejores servicios públicos y salarios decentes. El libro trata de demostrar la relación entre las buenas ideas y los movimientos eficaces.

¿El libro presenta alguna historia exitosa?

Sí. Señala que, hasta el momento, el siglo XXI ha sido bueno para muchos brasileños. El empleo formal, el salario mínimo y el ingreso promedio de las familias han aumentado, mientras que la pobreza ha disminuido. La evolución macroeconómica favorable, una serie de políticas gubernamentales progresistas y los buenos resultados alcanzados gracias a la negociación colectiva han desempeñado todos un papel en esta situación. Otro ejemplo es el de Suiza, donde después de tres años de negociación, el Gobierno en octubre 2010 estipuló un contrato normalizado para los trabajadores domésticos, el cual establece salarios mínimos obligatorios y condiciones de trabajo. Esta medida ofrece protección y permite a los empleadores defender sus derechos de manera más eficaz. Otro artículo hace un llamado por normas internacionales del trabajo para trabajadores domésticos en todo el mundo, un tema que está siendo discutido en la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra entre el 1 y el 17 de junio.