BORG EL ARAB, Egipto (OIT EnLínea) – Baher Mahmoud Hatem es un maestro una escuela de Borg el Arab, sede del aeropuerto de Alejandría, la segunda ciudad más grande de Egipto.

Baher nos describió cómo era su trabajo antes de participar en un curso de formación de la OIT: “Iba al trabajo todos los días. Impartíamos clases de manera rutinaria: no tenía importancia lo que enseñábamos o lo que los estudiantes querían”.

Un día, Baher y otros colegas fueron invitados a participar de una formación de dos días organizada por la OIT en cooperación con la oficina de servicios públicos de empleo de Borg el Arab dentro del marco del proyecto que intenta garantizar una efectiva transición de escuela al trabajo a través de programas sobre orientación vocacional para los jóvenes, fundados por el gobierno de Italia.

El curso de formación versaba sobre el trabajo en equipo, el desarrollo de capacidades y cómo utilizar la orientación profesional para el empleo juvenil. Al principio Baher no estaba muy interesado, pero mientras más escuchaba, más comprendía la importancia del papel que tiene que desempeñar un profesor en relación con sus alumnos.

“Comprendí cuán importante es el papel de una maestro para cambiar sus vidas, así como nuestra responsabilidad hacia la sociedad. Al día siguiente quería aprender más y conocer qué era la orientación profesional y cuál era mi función. Significó mucho para mí tener la capacidad de ayudar a los estudiantes a escoger sus carreras, para que estén satisfechos con sus estudios y después con su trabajo”, explicó Baher.

En fin, Baher se incorporó al equipo de trabajo del proyecto y participó en todas las actividades de ese año. Decidió obtener una maestría para adquirir más conocimientos y tener la capacidad de ofrecer mejor orientación.

“Esto me permitió organizar las actividades de orientación profesional para los estudiantes. También adopté este método en mi hogar, con mi esposa y mis hijos”, agregó.

El 90 por ciento de todos los desempleados tiene menos de 30 años

“En Egipto, el 90 por ciento de todos los desempleados tiene menos de 30 años. La tasa de desempleo juvenil es seis veces mayor que la de los adultos. Y los pocos jóvenes que encuentran un trabajo están desfavorecidos en lo que respecta a los salarios y las condiciones de trabajo en comparación con los adultos”, explicó Dorothea Schmidt, experta principal sobre empleo de la oficina de la OIT en El Cairo.

Dorothea Schmidt también observa “una discrepancia entre las expectativas de trabajo de los jóvenes y los empleos disponibles en el mercado laboral, además de una falta de correspondencia entre las expectativas de los empleadores en cuanto a las calificaciones y las que poseen los egresados de las universidades, de los centros de formación profesional y de los institutos de formación técnica”.

“La incapacidad de encontrar un empleo decente una vez finalizados los estudios puede tener efectos prolongados en las perspectivas profesionales y los ingresos de un individuo a lo largo de su vida. Orientar a los jóvenes hacia la decisión profesional correcta así como mejorar la transición del colegio al trabajo puede contribuir a superar las dificultades que enfrentan los jóvenes, en particular las mujeres jóvenes, en relación al acceso limitado a las informaciones fiables sobre el mercado laboral, la asesoría y el apoyo”, explicó Luca Azzoni, especialista principal sobre conocimientos teóricos y prácticos y empleabilidad en la oficina de la OIT en El Cairo.

Modernizar las instituciones del mercado laboral en Egipto

El objetivo del proyecto de la OIT es por lo tanto facilitar la entrada de los jóvenes en el mundo del trabajo a través de la modernización de las oficinas de empleo de Egipto. El proyecto desarrolla las capacidades en las oficinas del servicio público a fin de ofrecer asesoramiento sobre la inserción laboral y orientación profesional, identificar las necesidades de los empleadores y armonizar la oferta y la demanda de empleo. Para apoyar a estas oficinas en sus actividades, el proyecto establece relaciones con los ministerios, instituciones educativas e interlocutores sociales (empleadores, sindicatos), asociaciones de jóvenes y sociedad civil.

La selección de las gobernaciones que participan en el proyecto fue realizada con atención a fin de abarcar segmentos clave de la economía de Egipto: Fayoum con su potencial agrícola y turístico; Alejandría y la ciudad “6 de octubre” por sus nuevos emplazamientos industriales que prometen absorber más trabajadores; y Luxor y Aswan por ser destinos privilegiados de turistas.

“En Egipto, la atención hacia el asesoramiento en la orientación profesional es relativamente nueva y éste es el primer proyecto de la OIT que aborda el tema a nivel nacional. Las oficinas del servicio público de empleo en las cinco gobernaciones del proyecto han ofrecido orientación profesional a un total de 12.000 jóvenes y empleado a 9.000 jóvenes con diferentes calificaciones en diversas empresas”, explicó Luca Azzoni.

Este proyecto está estrechamente vinculado a la realización de los objetivos acordados por Egipto con el Marco de Asistencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo (MANUD) para 2007-2011, y apoya la implementación de la hoja de ruta para la recuperación que fue adoptada entre la OIT y el Ministerio de Trabajo a raíz de la revolución a principios de 2011.

“El gobierno provisional y diversos donantes han manifestado gran interés en este enfoque y están dispuestos a extender el proyecto a otras gobernaciones de Egipto”, dijo Nagwa Ismail, Coordinadora nacional del proyecto para la OIT. “El enfoque no sólo incrementa las oportunidades de encontrar un trabajo para los jóvenes, ellos también obtienen calificaciones que serán esenciales en el proceso de democratización posrevolucionario”.

Charles Dan, Director Regional de la OIT para África, considera que el proyecto piloto tiene un enrome potencial para ser desarrollado y replicado. “La promoción del empleo juvenil es la principal prioridad identificada en los Programas de Trabajo Decente por País de la OIT en África. Este proyecto tiene efectivamente un gran potencial de expansión a nivel nacional. Más jóvenes egipcios se beneficiarían de orientación profesional y estarían mejor preparados para entrar en el mercado laboral”, concluyó.