El 1 de julio, el presidente ruso Vladimir Putin firmó una ley para ratificar el Convenio (Servicio Público), 1978 (núm. 151) Relaciones del Trabajo de la OIT.

La ley fue aprobada por la Duma Estatal, cámara baja del parlamento ruso, el 18 de junio y por el Consejo de la Federación, la cámara alta, el 25 de junio.

Bajo el Convenio, los empleados públicos gozarán de protección adecuada contra todo acto de discriminación tendiente a menoscabar la libertad sindical en relación con su empleo. Los empleados públicos, como los demás trabajadores, deben tener los derechos civiles y políticos esenciales para el ejercicio normal de la libertad sindical, a reserva solamente de las obligaciones derivadas de la condición y de la naturaleza de sus funciones.

Las organizaciones de empleados públicos deben gozar de completa independencia respecto de las autoridades públicas y de adecuada protección contra todo acto de injerencia de una autoridad pública en su constitución, funcionamiento o administración.

Según el gobierno, la legislación de Rusia cumple con las disposiciones y requisitos del Convenio. Además, entiende que la ratificación del Convenio no requiere presentar enmiendas a las leyes rusas, ya que no contiene normas distintas de las previstas en la legislación de Rusia.

Los convenios de la OIT entran en vigor un año después de que el instrumento de ratificación se ha registrado por el Director General de la Organización Internacional del Trabajo.