Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

Q&A

Apoyo de la OIT a los empleadores durante la crisis de la COVID-19

La crisis de la COVID-19 ha ejercido una enorme presión sobre los empleadores y las empresas del sector privado, que luchan por sobrevivir y seguir ofreciendo trabajo decente. Deborah France Massin, directora de la Oficina de Actividades para los Empleadores, explica cómo ha estado ayudando con servicios y herramientas y al garantizar que el punto de vista de las empresas esté representado ante los responsables de la toma de decisiones.

Opinión | 20 de mayo de 2020
Deborah France Massin, Directora de la Oficina de Actividades para los Empleadores de la OIT

¿Qué han hecho los mandantes empleadores de la OIT para apoyar a sus miembros durante esta crisis?

Los mandantes empleadores de la OIT han mostrado realmente liderazgo. Dada la situación de emergencia sanitaria, las organizaciones empresariales y de empleadores (EBMO, por sus siglas en inglés) han proporcionado servicios directos y orientación a sus miembros en ámbitos como la seguridad e higiene en lugar de trabajo, el teletrabajo, otras cuestiones relacionadas con el lugar de trabajo y al vincularlos con los proveedores de servicios de salud, etc. Además, han evaluado el impacto de la pandemia sobre la salud de las empresas y su sostenibilidad. No hay empleos si no se garantiza la continuidad de las empresas. Estas organizaciones han llevado este razonamiento a los gobiernos y formulado propuestas en materia de políticas de manera que las medidas de recuperación y sostenimiento económico sean eficaces.

¿Cuáles son sus principales mensajes?

Además de hacer frente a la emergencia sanitaria, en este momento el mensaje clave es proveer de liquidez a las empresas, en especial a las PYME, a fin de prevenir bancarrotas masivas, quiebra de empresas y desempleo, así como atender a los más vulnerables. Esto es importante, no sólo a corto plazo, sino también a medio y largo plazo, en vista de la recesión económica prevista y el aumento del desempleo. El desarrollo de la resiliencia financiera del sector privado garantizará una recuperación económica más rápida y sostenible.

Sería peligroso pensar que las empresas estarán en la posición de recomenzar automáticamente como si nada hubieses pasado. Es necesario el tipo de apoyo apropiado por parte de los gobiernos a fin de crear y facilitar un entorno propicio para la resiliencia y el crecimiento del sector privado que genere empleos decentes y productivos. El sector privado será esencial para la recuperación del empleo y el consumo, así como para la inversión y la innovación que propulsarán las economías. La confianza de las empresas en la fuerza de las políticas gubernamentales, en la claridad de su dirección y su continuidad, será fundamental. Alguien una vez dijo que hay décadas cuando no pasa nada y semanas en que transcurren décadas. Es lo que sentimos en este momento. Decisiones políticas drásticas están siendo adoptadas en horas en vez que en años y las EBMO deberán demostrar un verdadero liderazgo y capacidad para ejercer presión en el proceso de reconstruir la resiliencia y apoyar el cambio.

© OIT

¿Cuál ha sido el papel del diálogo social?

La habilidad de las organizaciones representativas para movilizar las opiniones de la economía real y elaborar propuestas y soluciones en horas o días no debe ser subestimada. Hemos visto numerosos ejemplos de ello y ha sido una herramienta decisiva en esta crisis. Los esfuerzos desplegados por los interlocutores sociales han proporcionado estabilidad a las sociedades, sacudidas por la voracidad y rapidez del virus. Sin embargo, en ciertas instancias nuestros mandantes nos han dicho que el estado de emergencia ha sido utilizado para restringir la función de los interlocutores sociales y que los procesos consultivos se han reducido o han sido abandonados. Para el avance democrático, instituciones como las organizaciones empresariales representativas y los sindicatos independientes son fuerzas que sirven de contrapeso, que puedan decir la verdad al poder.

¿Qué está haciendo ACT/EMP para apoyar a nuestros mandantes empleadores?

Cuando comenzó esta situación, nuestros mandantes tenían ideas claras, necesitaban herramientas prácticas y orientación para implantarlas con sus miembros. Hasta el momento, ayudados por algunos mandantes, hemos desarrollado un número de herramientas para que las EBMO las utilicen con sus miembros, que van desde cómo hacer frente a las cuestiones relacionadas con la COVID-19 en el lugar de trabajo, una herramienta de continuidad de las actividades y, recientemente, una herramienta de regreso al trabajo. La respuesta ha sido muy positiva, lo cual demuestra que vamos por el buen camino. No obstante, más allá de esto, el desafío que se presenta es muy real; tenemos que reconocer que nuestros mandantes enfrentan tiempos inciertos. La afiliación a las EBMO es un costo no esencial para las empresas, en especial para aquellas que luchan por sobrevivir. Los dirigentes de las EBMO nos han expresado gran preocupación sobre la retención de sus miembros a corto, medio y largo plazo. La paradoja es que un defensor fuerte y colectivo del sector privado es ahora más necesario que nunca. Por consiguiente, lo que le ofrecemos también necesita cambiar y ser pertinente en términos de estrategias para la resiliencia y el liderazgo.

En colaboración con la Organización Internacional de Empleadores acabamos de lanzar una encuesta dirigida a todas las organizaciones de empleadores constitutivas de la OIT. Queremos obtener un cuadro global de sus desafíos actuales y futuros. Así como es necesario que ellas escuchen a sus miembros, la OIT deberá escucharlas a ellas de manera que podamos comprender sus realidades y, en última instancia, prestarles un mejor servicio.

Por Deborah France Massin, Directora de la Oficina de Actividades para los Empleadores de la OIT