GINEBRA (OIT Noticias) – Un gran número de obstáculos originados por 50 años de ocupación israelí dominan la realidad cotidiana de las mujeres y los hombres trabajadores y sus familias en los territorios árabes ocupados, señala la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en un nuevo informe.

La edición 2017 del informe La situación de los trabajadores en los territorios árabes ocupados menciona las graves restricciones a la circulación y a la actividad económica, el prolongado bloqueo de la Franja de Gaza y un proceso de paz estancado, junto a las actividades de asentamiento israelíes como factores determinantes del continuo deterioro en los territorios ocupados.

El informe anual del Director General, que será sometido a la Conferencia Internacional del Trabajo de la OIT en junio, examina las condiciones de empleo y del mercado laboral y los derechos de los trabajadores en la Ribera Occidental, incluida Jerusalén Oriental, Gaza y el Golán sirio ocupado.

“Todos los esfuerzos por fortalecer el mercado de trabajo palestino chocan con el control al que la ocupación somete las fronteras palestinas y el acceso a la tierra, el agua y los recursos naturales”, afirma el Director General de la OIT en el prólogo del informe.

“Las oportunidades de trabajar, cultivar la tierra, producir y crear puestos de trabajo en los territorios ocupados siguen siendo muy reducidas”, continúa Ryder.

El informe exhorta a revitalizar el proceso de paz con miras a lograr una solución de dos Estados.

“Uno de los propósitos de los Acuerdos de Oslo, que ahora ha quedado reducido a una aspiración lejana, era establecer mercados de trabajo eficientes, tanto para los israelíes como para los palestinos”, agrega Ryder. “La promoción y aplicación de la justicia social y el trabajo decente deben proseguir, dado que son las piedras angulares de los esfuerzos de paz.”

Desempleo generalizado

Si bien la Ribera Occidental y Gaza registran cierto crecimiento económico, la misión de la OIT que viajó a la región para documentar el informe constató que sigue estando muy por debajo de su potencial. El crecimiento económico actual no es suficiente para mejorar los medios de vida, y apenas se traduce en un incremento del empleo.

“Tal vez ningún otro indicador refleje la situación de vulnerabilidad de los medios de vida palestinos de una manera tan significativa como los indicadores relacionados con el mercado de trabajo”, señala el informe.

La tasa de desempleo en el territorio palestino ocupado sigue siendo persistentemente alta, superior a la de cualquier otro país del Oriente Medio y el Norte de África y más del doble del promedio regional.

Más de una cuarta parte de la fuerza de trabajo palestina está desempleada; el desempleo juvenil sigue superando el 40 por ciento. Menos de la mitad de los palestinos mayores de 15 años son económicamente activos, y dos terceras partes de los jóvenes permanecen fuera de la fuerza de trabajo. Menos de una de cada cinco mujeres trabaja.

Para los cerca de dos millones de palestinos que viven en Gaza la situación es particularmente difícil. Gaza sigue estando aislada por tierra, mar y aire. La tasa de desempleo supera el 40 por ciento, y la mayoría de los jóvenes económicamente activos – 60 por ciento – están desempleados. Entre los titulados, el desempleo es casi universal. Los habitantes de Gaza siguen sin poder desplazarse para trabajar. “La coyuntura económica en general y la situación del mercado de trabajo en particular, son agobiantes”, afirma el Director General de la OIT.

En la Ribera Occidental, las restricciones a la circulación y a la actividad económica, y el predominio de los asentamientos han fragmentado el mercado de trabajo e impedido el desarrollo de una economía palestina viable y dinámica, señala el informe.

Los efectos de trabajar en Israel y en los asentamientos

El informe constata además que la falta de alternativas obliga a un número creciente de mujeres y hombres palestinos a buscar trabajo en Israel y en los asentamientos. El salario promedio de los palestinos que trabajan en Israel duplica con creces el que se percibe en la Ribera Occidental. Cerca de un cuarto del total de los salarios devengados por los palestinos de la Ribera Occidental provienen de empleos en Israel o en los asentamientos israelíes en la Ribera Occidental.

Sin embargo, muchos de los más de 100.000 trabajadores palestinos en la economía israelí enfrentan dificultades y están sometidos a condiciones de explotación. En particular, por intermediarios sin escrúpulos que obtienen beneficios desproporcionados por poner en contacto a palestinos que buscan trabajo con empleadores israelíes. A partir de distintos escenarios, el informe estima que aunque sólo 40 por ciento de los trabajadores palestinos en la economía israelí se viesen afectados por los intermediarios, esto representaría una cifra de 380 millones de dólares en “comisión del intermediario” en 2016, con alrededor de 17 por ciento de todos los salarios percibidos por los palestinos retenido por los intermediarios. No obstante, el informe indica que algunas de estas cuestiones urgentes están siendo abordadas por las autoridades israelíes quienes tienen la intención de reformar el régimen de permisos y mejorar el sistema de remuneración.

El informe además hace un llamado a favor de acciones urgentes para remediar las situaciones con frecuencia humillantes que sufren los trabajadores palestinos en los pasos fronterizos, debido al gran número de personas y a las largas esperas.

Con una situación laboral y perspectivas del mercado de trabajo cada vez más sombrías, la frustración de los jóvenes palestinos puede engendrar radicalización y violencia, advierte el informe.

Obstáculos a la construcción de un Estado

Con el proseguimiento de la construcción de un Estado en la parte palestina, el informe destaca que las instituciones palestinas son lo suficientemente sólidas para apoyar el Estado emergente, aunque es necesario invertir más en el fortalecimiento de la capacidad de gobernanza.

Sin embargo, la construcción de un Estado sigue estando considerablemente limitada por las persistentes divisiones internas así como por una reducción de la financiación de los donantes internacionales.

Los recientes avances en los territorios palestinos ocupados, como la elaboración del Programa Nacional de Políticas y la promulgación de la Ley de seguridad social para los trabajadores del sector privado, corren el riesgo de quedar sin efecto sin la financiación externa necesaria para su implementación.

Los palestinos “requieren un apoyo presupuestario considerable, y asistencia continua tanto humanitaria como para el desarrollo, en particular para aliviar el sufrimiento en Gaza. Los donantes deben estar conscientes de que a Autoridad Palestina y, de hecho, un Estado palestino viable, no pueden valerse por sí mismos desde el punto de vista financiero”, sostiene el informe.

“La ‘generación de Oslo’, nacida después de los acuerdos de paz, representa la mayoría de la población. Necesita esperanza y orientación. El precio de la tensión es, simplemente, demasiado elevado. La comunidad mundial ha de seguir comprometida con el fomento de la paz en el Oriente Medio y la plena condición del Estado de Palestina”, concluye el informe.

El informe anual de la OIT sobre la situación de los trabajadores en los territorios árabes ocupados fue preparado por miembros de la OIT quienes visitaron la Ribera Occidental, incluida Jerusalén Oriental, así como Gaza, Israel y el Golán sirio ocupado. El informe será sometido a la Conferencia Internacional del Trabajo de la OIT, que inicia el 5 de junio 2017 en Ginebra.