Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

Después del Tsunami Reconstruir las vidas: el primer paso para recuperar una comunidad

El maremoto que sacudió el Océano Indico causó un millón de muertos sólo en Sri Lanka e Indonesia, en su mayor parte pescadores, turistas y trabajadores de pequeños negocios. En Sri Lanka, el desastre hizo que medio millón de personas perdieran su empleo – cifra que se suma a las 750.000 personas que ya estaban desempleadas. Un estudio de la OIT estima que la mitad de los recién desempleados podrían volver a trabajar antes de final de año – si se proporciona ayuda suficiente para reconstruir y reparar los lugares de trabajo destruidos así como para reemplazar el equipo perdido. Este informe da cuenta de los problemas que todavía quedan por resolver.

Artículo | 23 de marzo de 2005

HAMBANTOTA, Sri Lanka – El vendedor de coco aparca su bicicleta frente a uno de los pocos edificios que han quedado en pie cerca de la playa de Hambantota en la costa sur de Sri Lanka, uno de los pueblos pesqueros más afectados por el maremoto.

Ha estado vendiendo cocos en el mercado de pescado durante más de 15 años, aplacando la sed de cientos de pescadores y compradores que a diario llenaban la playa con sus productos.

"Solía traer los cocos en un tractor y vendía entre 100 y 200 al día", dijo. "Los días de mercado, los traía en camión y vendía hasta 500. Todo eso se acabó."

Su tractor, su puesto, los compradores, de hecho todo el mercado ha desaparecido. El monumento a la pesca que presidía una plaza de 200 puestos ahora sólo se yergue ante dos.

El día del maremoto, Nandhasena estaba en su puesto justo bajo el monumento situado cerca del centro del mercado, cuando vio que la lona que lo protegía del sol intenso de Sri Lanka era arrastrada hacia el océano. Algo le decía que aquello no era normal y corrió desde la playa gritando a los demás que le siguieran. Consiguió subirse a un alto, a diferencia de la mayoría de la gente del mercado.

Hoy, su puesto se reduce a una bicicleta destartalada de la que cuelgan dos ramas de coco. Quizás tenga en total 12 cocos para vender, pero hoy sus únicos clientes son un grupo de estudiantes universitarios. Han sido contratados por el proyecto JobsNet de la OIT para encuestar a los sobrevivientes del desastre.

Creación de una red nacional de empleo

JobsNet ha estado trabajando con la OIT para crear una red nacional de centros de empleo en Sri Lanka. Sus oficinas se comunican por Internet mediante una serie de estaciones repetidoras de radio, y no a través de la telefonía tradicional. Sus sistemas internos no resultaron afectados por el maremoto y en los primeros días del desastre, el correo electrónico e Internet eran los únicos medios a través de los cuales los sobrevivientes de esta zona se podían comunicar con el resto del mundo.

"Nuestro equipo de encuestadores ha tratado de averiguar lo que la gente estaba haciendo antes del maremoto, a qué se dedicaban, y cómo pensaban ahora ganarse la vida", dice Sujith Yamasinghe, uno de los coordinadores del proyecto JobsNet en Sri Lanka.

Entrevistar a los supervivientes puede resultar una tarea delicada. Muchos todavía están traumatizados porque lo han perdido todo. La OIT Y el Programa Mundial de Alimentos organizaron la encuesta utilizando la estructura de JobsNet. Marc Vanteenkiste, Consejero del proyecto JobsNet de la OIT, expresó su preocupación porque los voluntarios con los que contaba eran muy jóvenes, pero tras consultar con varias autoridades en materia de desastres, le dijeron que siguiera adelante.

"Cuando los encuestadores son jóvenes, la gente se siente más cómoda y es más realista. No se esperan nada de un joven", dice.

Vansteenkiste señala que la encuesta es importante porque no sólo abarcará la pérdida de empleos en el sector formal, sino también en el sector informal, y entre los propietarios de pequeños negocios como Nandhasena que pudieran no tenerse en cuenta en otras encuestas.

Según Vansteenkiste, "puede que sólo necesiten una pequeña suma, pero esas sumas serán esenciales para reconstruir toda la comunidad".

Ahora bien, es importante que la ayuda vaya a donde más se necesita. Siguen llegando suministros para satisfacer las necesidades básicas de alimentos y refugio, pero la labor a largo plazo de reconstrucción de la economía de esta pequeña ciudad se hará persona por persona. En la encuesta se evaluó qué propiedad, equipo y capacidades se habían perdido y lo que se necesitaría para que la gente volviera a trabajar. La encuesta sirve de mapa en el que se muestran las vías que hay que seguir para volver a levantar la comunidad.

El veinte por ciento de los hogares afectados no esperan obtener ingresos en el mismo sector de actividad en el que trabajaban antes de producirse el maremoto. Los sectores más afectados han sido la pesca, el turismo y los pequeños negocios, como la tienda de ultramarinos del Sr. Mowlana. Solía suministrar arroz y otros alimentos al por mayor a los mercaderes locales y ganaba en torno a 100 dólares de los Estados Unidos al día. Ahora sólo le quedan unos cuantos periódicos y un almacén vacío. En total, al menos el 56 por ciento de todos los hogares de una o más personas, pueden necesitar fondos para financiar sus negocios o empleo independiente.

"Lo que necesito ahora es una subvención", dijo. "La mitad de la gente del pueblo ha perecido y tengo que reembolsar varios préstamos bancarios. Me bastaría con una pequeña subvención", dijo Mowlana.

Al observar el escenario devastado de lo que fue una comunidad próspera, cuesta creer que bastará con un pequeño préstamo. Los trabajadores están limpiando los escombros en Hambantota e incluso han reconstruido la torre de comunicaciones. El maremoto que destruyó casas, vidas y medios de vida en una brillante mañana de diciembre no logró ahogar el espíritu empresarial de una ciudad pesquera que está reconstruyendo su comunidad de cara al mar.


Nota 1 - Véase " Earthquake-Tsunami Response: ILO Proposals for Reconstruction, Rehabilitation and Recovery", www.ilo.org.