MAPUTO, Mozambique – Las cajas de computadoras arrinconadas contra las paredes de algunas oficinas del Instituto Nacional de Seguridad Social de Mozambique, son una señal inequívoca del proceso de informatización que permitirá mejorar la prestación de un servicio esencial para el combate a la pobreza en ese país del sudeste de África.

Pero el desafío va más allá de la modernización de infraestructura. Aunque las computadoras permitirán mejorar el registro de más de 280.000 trabajadores inscritos y agilizar los cobros a empresas deudoras, un problema crónico para su estabilidad financiera, la OIT ha planteado que para mejorar la cobertura de los 16 millones de mozambiqueños será necesaria una estrategia basada en la innovación.

De acuerdo con estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los sistemas institucionales de seguridad social existentes en Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique y Santo Tomé y Príncipe, los Países Africanos de Idioma Oficial Portugués (PALOP), cubren menos de 10 por ciento de la población económicamente activa.

El principal motivo de esta baja cobertura es que los sistemas existentes incorporan sólo a trabajadores asalariados, principalmente del sector público, en un continente donde la mayor parte de las familias obtienen sus ingresos en la economía informal.

"Todos deberían tener acceso a la seguridad social", dijo el Presidente de Mozambique, Joaquim Chissano, durante el reciente lanzamiento de la Campaña Mundial sobre Seguridad Social y Cobertura para Todos de la OIT para los países PALOP en Maputo. "Para nuestro gobierno la seguridad social no es un costo, sino un activo, un recurso que contribuye a lograr una sociedad más equilibrada", agregó el mandatario.

El Director Ejecutivo del Sector de la Protección Social de la OIT, Assane Diop, recalcó en Maputo que la seguridad social debe ser considerada como "un elemento clave en la lucha contra la pobreza". Además planteó a los representantes de los PALOP presentes en el lanzamiento de la Campaña Mundial que en un continente donde la mayoría de los trabajadores están en la economía informal "el problema de la baja cobertura deberá abordarse con técnicas inclusivas sobre una base comunitaria".

Con la colaboración del Gobierno de Portugal, la OIT inició hace cinco años el programa PROSOCIAL de cooperación técnica para el desarrollo de los sistemas de protección social en los PALOP.

En una primera fase el proyecto se concentró en respaldar la formulación de políticas nacionales sobre seguridad social. "Era necesaria una visión de futuro", explicó Alessandro Giuliano, especialista de la OIT que ha coordinado el desarrollo del proyecto Prosocial en los PALOP.

La segunda fase estuvo concentrada en los institutos de seguridad social, en sus operaciones, en las funciones que sería necesario asumir para aumentar la cobertura y en los planes para el futuro.

Y la tercera etapa, cuya aplicación en los PALOP coincide con el lanzamiento de la Campaña Mundial, es la de realizaciones, tanto de mecanismos legales para sustentar una política de seguridad social como de acciones para el fortalecimiento de los institutos, a través de procesos de capacitación y de informatización.

"Las nuevas estructuras deben estar preparadas para extender la seguridad social a los grupos excluídos mediante políticas innovadoras", comentó Giuliano. En Africa donde la economía informal es muy grande y heterogénea, es necesario desarrollar sistemas especiales.

Pero además hay una porción importante de la población que no tiene los medios para cubrir su protección social. De acuerdo con el informe sobre "Trabajo Decente para el Desarrollo de África" presentado a fines de 2003 por el Director General de la OIT, Juan Somavia, en ese continente unas 300 millones de personas que viven en extrema pobreza, con un dólar al día o menos.

Los sistemas de microseguros son experiencias innovadoras que están siendo consideradas para extender la cobertura a las personas con menos recursos, como parte del proyecto de Estrategias y técnicas de lucha contra la exclusión y la pobreza (STEP), que también cuenta con el respaldo de Portugal.

"Hay una voluntad de los gobiernos de buscar las fórmulas para extender la cobertura, pero el comienzo siempre es durísimo", comentó Giuliano.

Todos los PALOP enfrentan problemas de exclusión social que se reflejan en una alta incidencia de la pobreza. En países como Angola y Mozambique, que además son los más poblados, las dificultades son agravadas por secuelas de conflictos bélicos que dañaron economías con fuerte vocación rural y desplazaron a muchísimas personas.

El documento de la Estrategia de combate a la pobreza de Angola indica que 68 por ciento de la población es pobre, y la meta es reducir esa proporción a la mitad para 2015. Además, el desempleo urbano alcanza a 46 por ciento.

El lanzamiento de la Campaña Mundial sobre Seguridad Social y Cobertura para Todos para los PALOP en Maputo será seguido por otros lanzamientos en Africa, en Dakar, y posteriormente en Kinshasha.

La OIT ha hecho notar en el marco de la Campaña Mundial que apenas 20 por ciento de los trabajadores del mundo tienen acceso a una seguridad social adecuada.

Para saber más sobre la Campaña Mundial en materia de Seguridad Social y Cobertura para Todos: www.ilo.org/spanish/protection/socsec/pol/campagne/index.htm

Para información sobre inclusión social en los PALOP: www.inclusao-palop.org/index.htm.

Para consultar el documento "Decent Work for Africa's Development" (Trabajo Decente para el Desarrollo de África): www.ilo.org/english/standards/relm/rgmeet/10afrm/dg-rep2.pdf