V Seminario sobre Economía Informal en Argentina

Hacia un enfoque integrado para la formalización

Representantes de gobierno, trabajadores, empleadores, y del ámbito académico debatieron sobre las características de la economía informal en Argentina y las políticas destinadas a promover la formalización laboral.

Noticia | 13 de septiembre de 2017

La Oficina de la OIT para la Argentina organizó los días 12 y 13 de septiembre el V Seminario sobre Economía Informal, cuyo objetivo fue examinar y debatir sobre políticas y programas dirigidos a mejorar la transición de la economía informal a la economía formal, con énfasis en la búsqueda de un enfoque integrado, poniendo de relieve la mirada tripartita que existe sobre el tema.

La economía informal absorbe más de la mitad de la fuerza de trabajo del mundo y comprende a más del 90 por ciento de las pequeñas y medianas empresas. Como consecuencia, millones de trabajadores y unidades económicas en todo el mundo padecen condiciones de trabajo deficientes y carecen de derechos en el trabajo. El empleo de baja calidad, una protección social inadecuada y baja productividad son algunos de los obstáculos que enfrentan los trabajadores y las empresas cuando caen en la trampa de la economía informal.

El Director de OIT Argentina, Pedro Américo Furtado de Oliveira, participó en la apertura del seminario remarcando la influencia del diálogo social en la formalización de la economía en Argentina. “Sin diálogo social, Argentina no sería el país de vanguardia que es en cuanto a la formalización laboral. Es por eso que los sectores sociales deben seguir brindando espacios para debatir y continuar reduciendo la informalidad”, afirmó, en compañía del secretario de Seguridad Social del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTEySS), Juan Carlos Paulucci Malvis.

El funcionario del Ministerio señaló que la informalidad laboral no sólo se encuentra en la economía popular, sino también en las pequeñas evasiones que ocurren en el sector formal. “Cuando un comercio te da un ticket no válido como factura, no paga impuestos y también cae en la informalidad”, sostuvo.

Philippe Mercadent, jefe del Departamento de Mercados de trabajo inclusivos, relaciones laborales y condiciones de trabajo (OIT Ginebra), destacó que “la informalidad no es sólo un problema de registro laboral, sino también de protección social”, e hizo hincapié en afianzar la coordinación interministerial para facilitar la transición hacia la economía formal de los trabajadores informales. “La informalidad va más allá del Ministerio de Trabajo, es un problema que debe ser abordado también por los ministerios de Hacienda, Educación y Desarrollo Social, entre otros, y de forma conjunta”, afirmó.

Claire Hobden, oficial Técnica de Condiciones de Trabajo y Trabajo Doméstico de OIT Ginebra, presentó el panorama de la formalización del trabajo doméstico en el mundo, y se refirió a las características y manifestaciones de la informalidad en el trabajo doméstico y a los factores que impulsan la formalización en el sector. Hobden señaló que por sus características, “el trabajo doméstico es un trabajo como ningún otro, pero requiere los mismos derechos para los trabajadores”.  La funcionaria destacó además que “la falta de representación de los trabajadores domésticos es uno de los grandes desafíos del sector en el mundo”.

En el marco de la formalización laboral, se presentaron además experiencias de políticas de inspección de Santa Fe y de Chile, políticas de protección social de los trabajadores independientes, y los aspectos productivos y tributarios para una formalización con trabajo decente.

En el cierre de la actividad, representantes del gobierno, empleadores y trabajadores debatieron sobre los logros y desafíos de la formalización laboral.

José de Anchorena, subsecretario de Políticas, Estadísticas y Estudios laborales del Ministerio de Trabajo resaltó el valor del diálogo en la actividad y la importancia de “reducir la informalidad dentro de un contexto de los derechos y las obligaciones existentes, de manera gradual y coordinada”.




La Recomendación núm. 204

La Recomendación núm. 204 sobre la transición de la economía informal a la economía formal, define la economía informal como “todas las actividades económicas desarrolladas por los trabajadores y las unidades económicas que — en la legislación o en la práctica — están insuficientemente cubiertas por sistemas formales o no lo están en absoluto.

La norma, adoptada por la Conferencia Internacional del Trabajo en 2015, y que por primera vez ofrece orientación a los Estados miembros, tiene tres objetivos:

  • facilitar la transición de los trabajadores y de las unidades económicas de la economía informal a la formal;
  • promover la creación de empresas y de empleos decentes en la economía formal, y
  • prevenir la informalización de los empleos formales.