Una región con empleo enfrenta el desafío de la desigualdad

El Panorama Laboral 2012 de América Latina y el Caribe presentado por la OIT este martes en México dice que la tasa de desempleo sigue cayendo, los salarios reales aumentan, hay progresos en la expansión del trabajo formal y avanza la cobertura de la seguridad social. Por Elizabeth Tinoco

Artículo | 18 de diciembre de 2012
Los nuevos indicadores sobre el trabajo en América Latina y el Caribe retratan una región que pasa por su mejor momento a pesar de las crisis en otras latitudes.

Ahora, enfrentamos el reto de aprovechar esta plataforma para reparar déficits que entorpecen las expectativas de desarrollo.

El Panorama Laboral 2012 de América Latina y el Caribe presentado por la OIT este martes en México dice que la tasa de desempleo sigue cayendo, los salarios reales aumentan, hay progresos en la expansión del trabajo formal y avanza la cobertura de la seguridad social.

En 2012 la tasa promedio de desempleo urbano para la región bajó de nuevo hasta 6,4%. Es un logro importantísimo para un lugar del mundo donde hace menos de una década ese indicador superaba el 10%. Y en 2013 la tasa de desempleo urbano continuará bajando, probablemente hasta 6,2%. Estos niveles de desempleo se encuentran en sus mínimos históricos.

En cuanto a los ingresos de las personas, hasta el tercer trimestre de 2012 los salarios reales crecieron más en varios países y los salarios mínimos más de 6% en el promedio regional. Hay importantes indicios de que también mejora la calidad del empleo. En muchos países el empleo asalariado, asociado a la formalidad, creció más que el trabajo por cuenta propia, vinculado a la informalidad.

La cobertura de seguridad social tanto en salud como en cotización a pensiones está por encima de la línea de 60 por ciento tras mejorar varios puntos en los últimos años.

Son buenas noticias pero queda mucho por hacer:

• casi 15 millones de personas están desempleadas

• entre quienes si tienen trabajo casi la mitad está en situación de informalidad

• hay cerca de 20 millones de jóvenes que no estudian ni trabajan presumiblemente desalentados por altos índices de desocupación y malas condiciones laborales

• la pobreza ha bajado pero continúa afectando a 167 millones de personas

• alrededor de 90 millones de trabajadores y trabajadoras no tienen cobertura de seguridad social.

Las mujeres siguen teniendo un desempleo 1,4 veces mayor que el de los hombres, y los jóvenes cargan con tasas que triplican las de los adultos.

Además la situación de los países es heterogénea y es evidente que más allá de los promedios regionales algunos tienen mejores resultados que otros. Y esto es percibido por la gente.

En este escenario es oportuno recordar que el crecimiento es indispensable pero no suficiente. Es necesario que los países coloquen la generación de más y mejores empleos como un objetivo fundamental de su política macroeconómica.

Las economías que mejor desempeño han tenido han sido aquellas que han estimulado la productividad, la apertura y la inversión, pero también aplicaron medidas para proteger el salario real y estimular la demanda agregada por medio del uso racional del gasto público, con una intervención positiva del Estado.

Al proteger los puestos de trabajo y los ingresos de las personas se genera un beneficio para las economías. Fue lo que hicieron muchos países de esta región para enfrentar la crisis.

La región ha avanzado, como lo demuestran los resultados incluidos en el Panorama Laboral 2012.

Los buenos resultados deben recordarnos que el empleo pleno y productivo y el trabajo decente siguen siendo el mejor antídoto contra la pobreza y la desigualdad.


* Directora Regional de la OIT para América Latina y el Caribe