102.a reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo

Balance y perspectivas: Entrevista con Luc Cortebeeck, Presidente del Grupo de los Trabajadores

Tras la conclusión de la 102.ª reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, el Presidente del Grupo de los Trabajadores, Luc Cortebeeck, nos habla en esta entrevista de los resultados que han obtenido los trabajadores, de las normas internacionales del trabajo y de la visión expuesta por el Director General, Guy Ryder, en su Memoria presentada a la Conferencia.

News | 26 June 2013
Acaba de concluir la 102.ª reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo. En líneas generales, ¿qué resultados han obtenido los trabajadores durante esta reunión?

Considero que hemos obtenido resultados. Sin embargo, en primer lugar quisiera resaltar varios elementos. En primer lugar, Myanmar, cuya situación ha evolucionado favorablemente gracias a la intervención conjunta de los trabajadores y de la OIT. De conformidad con el Artículo 33 de la Constitución de la OIT, se acaban de suspender las sanciones impuestas a dicho país. Hemos logrado que cada año, durante la reunión de marzo del Consejo de Administración, se lleve a cabo una evaluación de la situación en Myanmar en lo referente a las cuestiones del trabajo forzoso, el trabajo de los sindicatos y el diálogo sindical. Asimismo, examinaremos los efectos de las nuevas inversiones en el país; estudiaremos los resultados que se obtengan en materia de derechos humanos y derechos de los trabajadores. Por consiguiente, opino que los pasos que se acaban de dar son significativos para este país, que es objeto de seguimiento por parte de la OIT desde hace veinte años. En segundo lugar, cabe destacar VCT@WORK, una nueva campaña sobre el VIH/SIDA, que tiene por finalidad la detección voluntaria del VIH a 5 millones de trabajadores antes de 2015. Constituye un elemento esencial para la salud de los trabajadores, para su futuro y para el futuro de sus hijos. Esta campaña es fruto de la cooperación entre el ONUSIDA y la OIT. La participación de la OIT es necesaria para luchar contra la discriminación que sufren los trabajadores seropositivos.

Volviendo a los distintos temas de la Conferencia, en cuanto al empleo y la protección social en el nuevo contexto demográfico, algunos estudios recogen que en 2050 habrá cuatro personas activas por cada pensionista. En 2000 la cifra era de nueve personas activas por pensionista. Vemos de inmediato el problema que se plantea: ¿quién trabajará para los pensionistas del futuro? En determinadas regiones del mundo existe en la actualidad una población muy joven que el día de mañana se habrá jubilado, siempre y cuando aumente la esperanza de vida. Durante esta Conferencia se han formulado propuestas de reflexión a largo plazo sobre el empleo de los jóvenes y de los trabajadores de edad. Cabe citar una de las conclusiones de la Comisión que ha tratado este particular: “No es imposible hacer frente a los retos de la transición demográfica. El cambio demográfico debería abordarse con una perspectiva integrada y a más largo plazo. Las orientaciones propuestas en materia de políticas deben tomar en consideración el carácter complementario de las políticas de empleo y protección social para todos los grupos de edad a lo largo de toda la vida. Dichas políticas deben descansar en la solidaridad intergeneracional y la cooperación entre los países. El examen de las diversas opciones en materia de políticas para abordar las tendencias estructurales, como el envejecimiento no debe obedecer a la perspectiva cortoplacista y cíclica impuesta por la crisis”.

Resulta alentador comprobar que la seguridad social es considerada una necesidad no sólo social, sino también económica. La Comisión pide al Consejo de Administración de la OIT que estudie la posibilidad de elaborar un instrumento sobre la economía del cuidado.

También apareció el tema del diálogo social y, habida cuenta de la situación vivida en varios países con las medidas de austeridad, los trabajadores, como ya hicieran durante la Conferencia Regional de la OIT en Oslo, reafirmaron que la negociación colectiva es un tema muy importante para la OIT, y que la OIT es quien debe promover dicho diálogo social. Es preciso reforzar este diálogo social en los países. También es menester que los tribunales del trabajo sean independientes. En este sentido, solicitamos que se elabore una norma sobre la independencia de los tribunales del trabajo, pues ésta resulta indispensable para que exista la negociación social. De hecho, para preservar los resultados de la negociación social, los tribunales deben ser independientes. Después de la tragedia de Bangladesh, tenemos que sopesar también la necesidad de dotarnos de una norma para proteger a los trabajadores en las empresas, con independencia del tamaño de las mismas. La protección de los trabajadores es nuestra prioridad.

El tercer tema es el desarrollo sostenible. La economía, el desarrollo y el medio ambiente son elementos claves, pero es necesario respetar el equilibrio entre estos tres elementos. Para encaminarnos hacia una economía más verde, se impone una transición que puede tener repercusiones, por ejemplo, para las empresas y la sociedad, pero, sobre todo, para los trabajadores. Lamentamos que durante esta Conferencia no se haya podido iniciar el proceso para lograr un convenio sobre este tema.

Por ende, considero que se han logrado resultados en relación con los tres grandes temas de la Conferencia. Evidentemente, los trabajadores siempre queremos un poco más, pero, por otro lado, pienso que los resultados son buenos y abren perspectivas de trabajo, ya sea para elaborar instrumentos nuevos o para poner al día los instrumentos existentes.

Una de las cuestiones principales que se han debatido en esta Conferencia es la aplicación de las normas internacionales del trabajo. ¿Qué cabe destacar de los trabajos de la Comisión de Aplicación de Normas tras haber examinado 26 casos durante la presente reunión?

Este año la Comisión trabajó con una lista de 26 casos, cosa que no fue posible en 2012. En aquel momento, los empleadores impusieron su veto, su bloqueo. Este año hemos desplegado todos los esfuerzos necesarios para preparar la Conferencia y evitar que se volviese a repetir el problema del año pasado, y, finalmente, se logró una lista de 26 casos. No obstante, han surgido otras dificultades, en especial, el veto de los empleadores en el caso de Colombia y las declaraciones de éstos en contra el mandato de los expertos, que constituye un elemento esencial para la labor de la Comisión de Aplicación de Normas. Si no se reconoce la objetividad e imparcialidad de los expertos, el trabajo de la Comisión de Aplicación de Normas resulta imposible. El derecho de huelga sigue siendo un problema, y la solución de la Comisión ha sido incluir una oración en su informe que reza: “La Comisión no ha abordado el derecho de huelga, puesto que los empleadores cuestionan que el derecho de huelga quede reconocido en el Convenio 87”. Sin embargo, nosotros consideramos que los trabajos de la Comisión de Aplicación de Normas han sido un éxito este año. Por lo tanto, la Conferencia ha sido un éxito, pues se ha conseguido evitar el bloqueo de la discusión sobre la aplicación de normas, cosa que habría sido una catástrofe para la OIT y para la Conferencia. En lo que respecta a las tareas de la Comisión, considero que los casos examinados son muy interesantes, y ha habido un buen reparto geográfico y un equilibrio entre los tipos de convenios que se han tratado. La situación en Europa y en determinados países ha dado lugar a buenos debates, en especial, sobre Grecia y España. También se han examinado casos sobre Bangladesh y Guatemala. Opino que las conclusiones son de gran calidad, y no buscan sancionar sino aportar soluciones constructivas; ello significa que hay que ponerse a trabajar en esos países con y para nuestros compañeros de los sindicatos de los países examinados, con la ayuda de la OIT. Próximamente participaré en una misión de alto nivel de la OIT a Guatemala, y estamos al corriente de los problemas existentes en ese país, sobre todo, en cuanto a la libertad sindical, el derecho de negociación colectiva y la seguridad de los sindicalistas.

En el futuro considero que se formularán numerosas preguntas sobre la aplicación de normas. Será necesario preservar la misión, el objetivo de los trabajos y el mandato de los expertos, además de la función de la aplicación de normas. También tendremos que preparar argumentos sólidos para contrarrestar los ataques de los empleadores contra el derecho de huelga. Habrá que lograr un consenso con los empleadores y prepararse con todos los medios disponibles para lograr una solución antes de la próxima reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo en junio de 2014.

El Director General, Guy Ryder, presentó su Memoria, que lleva por título “Ante el centenario de la OIT: Realidades, renovación y compromiso tripartito”. ¿Cuál es la postura de los trabajadores en relación con la perspectiva expuesta por el Director General?

Consideramos que el Director General ha abierto varias posibilidades para el futuro y para preparar el centenario de esta institución. Opino que es esencial reflexionar acerca de las tareas de la Organización, sin adentrarse en sus valores. Queremos preservar esos valores. No obstante, por otra parte, es necesario ponerse manos a la obra ya. Por ejemplo, actualmente nos concentramos siempre en los países miembros de la organización, lo cual es importante; pero, también están las multinacionales, donde se toman decisiones acerca de las condiciones de trabajo de muchos trabajadores en el mundo. Por tanto, habrá que trabajar no sólo con los países miembros sino también con las multinacionales. Nosotros, en tanto que sindicatos, tenemos un papel esencial y específico a la hora de hallar soluciones en materia de trabajo y empleo, pero debemos cooperar también con otros, puesto que el mundo no estriba exclusivamente sobre el trabajo. Por ejemplo, en los debates sobre el sida, debemos empezar a dialogar con otras instituciones relacionadas con la salud, y con otras ONG. Lo mismo sucede en el caso del clima, se pueden entablar alianzas con otras ONG especializadas en la materia, etc.

A guisa de conclusión, el Consejo de Administración, en su próxima reunión de octubre, deberá retomar todos los elementos que han emanado de los trabajos de la 102.ª reunión de la CIT, y poner en marcha todos los mecanismos para su materialización.